El Ayuntamiento de Miranda vuelve a ilusionarse con la construcción de un museo en la Casa Don Lope. La Concejalía de Recuperación y Patrimonio Histórico opta a la subvención vinculada al cierre de Garoña y que reparte el Instituto para la Transición Justa. En una primera convocatoria la propuesta quedó fuera, pero ahora el concejal responsable, Carlos Diez, confiesa que «estamos confiados en que lo vamos a conseguir». Si sus deseos se cumplen, obtendría 2,9 millones de euros para dar vida al emblemático edificio y la casa contigua de la calle Tenerías, número 4. En esos inmuebles, el proyecto contempla adecuar seis áreas expositivas que sumarían poco más de 740 metros cuadrados.
«Las salas se habilitarán en el sótano, la planta baja, la primera y la entrecubierta, reformando al completo los edificios con zonas diáfanas», avanza Diez, quien detalla que la más grande contará con 173 metros y estará en la primera altura. Para completar todos los espacios, el edil aclara que «en el sótano del anexo iría un almacén para todas las instalaciones». Al margen de la rehabilitación, el proyecto plantea mantener las entradas actuales y el plan también incluye construir un ascensor exterior desde el jardín, que serviría para dar acceso a los dos inmuebles que formarían el museo «y así cumplir con todos los criterios de accesibilidad», concluye el responsable municipal.
Diez explica que queda por determinar qué uso se daría a cada una de las salas, ya sea para exposiciones permanentes o temporales. «El proyecto solo contempla el aspecto de rehabilitación», puntualiza el concejal, quien recuerda que en la idea original hace más de una década, «se hizo un plan para determinar lo que llevaría el museo, pero puede variar», matiza. Dentro de los aspectos que habrá que revisar está la importancia que se dé a las tenerías que se pretenden recuperar. Para este objetivo, Diez habla del estudio arqueológico necesario, que costará «unos 280.000 euros que están destinados a este cometido dentro del proyecto de 2,9 millones», remarca el edil, quien indica que buscarán restos de estos talleres del curtido de pieles en toda la parcela.
El responsable de Patrimonio aclara que optan a financiar al completo el museo, pero si no se obtienen los 2,9 millones «deberíamos de valorar si se puede hacer o no», admite. Lo que también quieren conseguir es el nuevo archivo, en el edificio de la calle La Fuente 22, aunque en este caso asume que no han encontrado una línea de financiación a la que presentarse.