La Policía Local de Aranda de Duero completó un total de 107 intervenciones a lo largo de este fin de semana. Entre ellas, destaca la detención de una pareja después de que se enzarzasen en una discusión en el domicilio familiar. El suceso, que tuvo lugar en la madrugada del sábado, terminó con el varón detenido por un presunto delito de violencia de género, mientras que a la mujer se la retuvo por un delito de lesiones.

En lo que a la carretera se refiere, se registraron un total de dos accidentes de circulación en vías urbanas. La buena noticia es que en ninguno de ellos hubo heridos, aunque sí que precisaron la intervención de los agentes de la Policía Local en ambos siniestros. Por otro lado, se sometieron a pruebas de alcoholemia a un total de 24 conductores en los tres puntos de control que se montaron a lo largo de los tres días, principalmente en horario nocturno. De todos ellos, tan sólo uno dio positivo, por lo que se le impuso al infractor una denuncia administrativa por superar la tasa máxima permitida al volante por las autoridades.

En cuanto a otras operaciones de menor importancia, se registraron cuatro intervenciones por ruidos molestos, denunciados por los propios ciudadanos afectados. Dos de estas actuaciones tuvieron lugar en sendos bares de la capital ribereña y las otras dos en viviendas.

Además, en el ámbito sanitario, los agentes colaboraron en cinco incidentes, regulando el tráfico en la zona para dejar trabajar al equipo de Emergencias.

Dentro de las distintas campañas a nivel nacional en las que la Policía Local arandina viene participando en las últimas semanas, el domingo finalizaba la relativa al control y vigilancia de camiones y autobuses. Este operativo, que arrancó el 13 de julio, concluyó en la capital ribereña con un total de 15 controles realizados, en los que se revisó la documentación de 51 vehículos, comprobando que todo estaba en regla y que los conductores habían cumplido con los turnos de trabajo y descanso marcados en la normativa actual.