El Ayuntamiento de Burgos no depende ya de sí mismo para salvar la ayuda de 1,8 millones de euros de fondos europeos que le concedieron para mejorar la seguridad en 58 pasos de peatones de la ciudad. Y no depende de sí mismo porque las obras siguen aún sin licitar, porque en el proyecto que se aprobó ayer en la Junta de Gobierno Local se estima una duración de los trabajos de doce meses y porque ese plazo hace imposible cumplir con el marcado por el Ministerio de Transportes, que fija el próximo 31 de diciembre como fecha tope para finalizar la actuación. Dicho de otra manera, al Consistorio en este momento solo le podrían salvar dos cosas. La primera de ellas es que una empresa presente una oferta en la que garantiza que reduce el plazo de ejecución de los trabajos de doce a ocho meses. La segunda es que el Gobierno conceda una prórroga.
El primer hito que tiene que cumplir el Ayuntamiento para poder recibir dicha ayuda, según viene recogido en las bases publicadas, es tener adjudicado el proyecto antes del 1 de abril. Es decir, que el equipo de Gobierno tiene menos de un mes para aprobar definitivamente los pliegos, sacarlo a concurso y decidir qué empresa va a hacer la obra. Por eso, ante el temor más que justificado de no llegar a tiempo a esta primera condición, los técnicos ya se han puesto en contacto con el Ministerio de Transportes para solicitar una prórroga.
Pero conseguir ese tiempo extra tampoco se presume una tarea sencilla, porque las bases dejan claro que «la modificación del plazo de ejecución de las actuaciones puede autorizarse si se dan circunstancias imprevisibles, debidamente justificadas, que hagan imposible el cumplimiento, pese a haberse adoptado, por parte de los beneficiarios, las medidas técnicas y de planificación mínimas que les resultaban exigibles».
El Ayuntamiento tuvo conocimiento en abril de la resolución provisional en la que se concedían esos 1,8 millones de euros y la definitiva llegó después del verano. El servicio de Ingeniería Industrial y Tráfico desarrolló el proyecto (ubicaciones o tipo de dispositivo inteligente a colocar, entre otras cosas) para poder cumplir los plazos marcados por el Ministerio, pero terminó bloqueado. Hasta ahora, que lo acaba de aprobar la Junta de Gobierno Local, cuando el tiempo apremia, para así avanzar en el proceso de licitación.
G-3, Gamonal y zona sur. El proyecto para la mejora de la seguridad de pasos de cebra tiene un presupuesto de 2,4 millones de euros y pretende actuar en un total de 58. El grueso de las obras se centrarán en los barrios del G-3, concretamente en Condesa Mencía, Victoria Balfé o Duque de Frías; en Gamonal, en Derechos Humanos, Luis Alberdi, Santa Bárbara o Juan Ramón Jiménez; y en la zona Sur, con intervenciones en San Pedro de Cardeña, Progreso o calle Madrid.
La Policía Local recabó hace dos años información sobre la peligrosidad de la mayoría de estos pasos de peatones y luego la remitió a la sección de Tráfico.