El calor sufrido en Burgos durante los primeros días de agosto ha causado estragos. Según los datos del sistema de monitorización de la mortalidad diaria por todas las causas (MoMo), que realiza el Instituto de Salud Carlos III, han sido 11 los burgaleses fallecidos por las altas temperaturas en las doce primeras jornadas del octavo mes del año. Concretamente siete mujeres y cuatro hombres que se suman a los ocho muertos que se contabilizaron en julio.

Desde el inicio de la temporada estival y hasta el 12 de agosto de 2024 la cantidad de decesos por causas atribuibles a las altas temperaturas en la provincia de Burgos sumó un total de 19, todos mayores de 65 años. En el transcurso del verano pasado se contabilizaron 35 fallecidos por esta misma causa, siendo el octavo periodo el que concentra el grueso de defunciones con 28.

El perfil que predomina es el de los ancianos mayores de 85 años, que computan 14 fallecidos. En la franja de 65 a 74 se registra una persona y tres de entre 75 y 84. La peor semana fue la que unió los últimos días de julio y los primeros de agosto, en esos siete días se alcanzaron hasta ocho fallecidos.

Desde que arranca el verano, a finales del mes de junio, hasta que se despide en septiembre, son únicamente el séptimo y el octavo periodo del año los que suman fallecimientos relacionados con el calor. En este 2024 el repunte de las temperaturas coincide precisamente con los picos de decesos que recoge el Instituto Carlos III. En lo que respecta a los datos de agosto, han perdido la vida siete mujeres y cuatro hombres.

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