La nula actividad comercial en el aeropuerto de Villafría contrasta con un movimiento formativo que lejos de ralentizarse va en aumento. La apertura de la escuela de pilotos FlyBy en 2019 supuso el primer salto, al que siguió dos años más tarde la puesta en marcha por parte de la UBU un grado propio para completar los estudios técnicos de estos profesionales. Ahora, la institución trabaja ya en la confección de otro título con una estructura académica similar al anterior, pero de mecánico de vuelo, en línea con el futuro centro de formación de estos profesionales proyectado en Burgos por la citada academia aeronáutica.
Por el momento, la Universidad se encuentra inmersa en el desarrollo del plan de estudios, tarea que no resulta sencilla debido a que no existe una oferta similar de estudios superiores ni en el sistema universitario nacional, ni en el europeo e, incluso, el estadounidense, algo que, sin embargo, representa también un aliciente para su impartición. La estructura será similar a la del título de Piloto Comercial para Transporte de Personas y Mercancías, con una duración aproximada de tres años repartidos entre formación propia y externa. De esta última, se tendrá que encargar una agencia acreditada por la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA) a través de un concurso público que la UBU convocará para cubrir esa docencia.
Lo mismo ocurre con el perfil del estudiante a incorporar al título, que responde al de alumnos que aspiran a convertirse en mecánicos de aeronaves pero que al mismo tiempo demandan un plus de conocimientos, más allá de los exigidos para su profesión, expedido por una universidad. Y es en este punto donde entra en juego la plantilla de profesorado de la Escuela Politécnica, con grados técnicos como las ingenierías de Mecánica, Electrónica o Informática y áreas vinculadas a la formación aeronáutica, a las que se añadiría el aprendizaje de idiomas en un alto nivel y otras materias más generalistas que aún están por definir.
En cuanto al horizonte temporal para el estreno de estos estudios, la previsiones iniciales lo sitúan en enero o febrero de 2026, según avanzan fuentes de la Universidad de Burgos, si bien aún quedan por cerrar cuestiones como el volumen de plazas a ofertar. No obstante, serán 25 como mínimo, según estipula la normativa del sector. Como ya ocurriera con las enseñanzas de piloto comercial, enmarcan esta iniciativa académica dentro de un contexto de crecimiento del campo de la aeronáutica y de fortalecimiento del mapa de titulaciones que refuerzan su proyección internacional. De hecho, el objetivo final pasaría por la creación de un «campus de formación en aeronáutica», ya que tras el grado de mecánico el catálogo formativo podría verse incrementado con el de gestión aeroportuaria.
Tanto la UBU como su Fundación, de quien dependen estas titulaciones, avanzan en el desarrollo de estos estudios sin dejar de lado la consolidación de los de piloto y valorando en ambos casos su repercusión no solo en el campus sino también en la economía de la ciudad. Cabe recordar que este título propio no requiere de autorización de la Junta, tal y como contempla el real decreto por el que se regulan estas enseñanzas.
La creación de esa futura titulación está vinculada a la respuesta obtenida con la de piloto, pero también relacionada con los planes de FlyBy de crear en Burgos una escuela de mecánicos. El consejero delegado de la firma, Álex Álvarez, valora de forma positiva la nueva opción académica e incluso anticipa la posibilidad de concurrir en su momento al proceso de licitación que se convoque para su puesta en marcha, al igual que también acudirá a la licitación de la UBU publicada el mes pasado para formar a la promoción 2024-2027 de pilotos comerciales después de haber ganado la primera hace dos cursos.
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