Un túnel para hacer 'desaparecer' 8.000 vehículos y 500 buses

I.E.-J.M. / Burgos
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Lejos de suponer un problema para los conductores, el proyecto para el centro de Burgos plantea un acortamiento del tiempo de ruta de más de cuatro minutos en sentido Norte-Sur y de dos y medio en sentido Sur-Norte

Construir un túnel es más que colocar pilotes y excavar. El proyecto contempla un mapa de accesos y salidas que modificará el sistema de circulación en las calles cercanas a la nueva infraestructura. La primera pregunta que se harán muchos ciudadanos es por dónde penetrarán los coches a ese paso subterráneo. Entre la Plaza del Cid y los primeros números de calle Vitoria habrá una entrada directa con un carril específico. La salida en sentido Norte se ubicará ya en la avenida del Cid, después de la estatua del Toro y casi frente al edificio Feygon (del que le separará una amplia zona de jardines). Los coches podrán seguir de frente, pero también girar hacia Plaza de España, pero no por el pasaje de Radio Popular, sino por la paralela, que ahora tiene solo un sentido de circulación -hacia avenida del Cid- y pasará a tener doble sentido.

Los vehículos, incluidos autobuses urbanos, que circulen de Norte a Sur tomarán la entrada al túnel en ese mismo lugar y lo abandonarán en avenida del Arlanzón, no hay prevista salida que permita continuar por el puente de San Pablo, para lo que habrá que regresar a calle Vitoria por la calle Condestable, pero a cambio evitan tener que circular por Plaza de España, San Lesmes y calle Vitoria para hacer lo mismo. 

Esta circunstancia da pie a explicar cómo podrán llegar los coches desde el puente de San Pablo hasta la calle Vitoria para coger el túnel ahí. Tomarán la avenida del Arlanzón y girarán hacia la calle Condestable, que perderá las escasas plazas de aparcamiento que posee. Después, habrán de incorporarse a calle Vitoria y colocarse en el carril derecho para ir al paso subterráneo. Ese mismo recorrido tendrán que hacer los coches que salgan del túnel en avenida del Arlanzón y quieran ir hacia la zona sur por el puente de San Pablo. En lugar de situarse a la derecha cuando se hallen en calle Vitoria deberán hacerlo a la izquierda, para acceder a la Plaza del Cid por un carril de circulación que discurrirá -en sentido inverso que en la actualidad- hacia el río y después la avenida de Palencia.

Recreación de la boca Norte del túnel, ya en avenida del Cid. Arriba, la transformación prevista de diversos espacios urbanos. Recreación de la boca Norte del túnel, ya en avenida del Cid. Arriba, la transformación prevista de diversos espacios urbanos.

Para no congestionar la calle Condestable, los buses urbanos alcanzarán a la calle Vitoria por la calle Toledo, donde también se suprimirán las plazas de aparcamiento, reservando Condestable únicamente para vehículos privados.

En el otro extremo, todos los automóviles que transiten por avenida del Cid en dirección Sur cogerán el túnel sin problema. También podrán hacerlo los coches que se hallen en Plaza de España. La calle  paralela al pasaje de Radio Popular, que ahora solo es en sentido avenida del Cid, tendrá doble sentido. Así que podrán girar a la izquierda y tomar la rampa para cruzar bajo tierra la calle Santander.

Estudios de tráfico. La primera opción que manejaba el PP, y así figura en su programa, era la simple peatonalización de la calle Santander. No hablaba expresamente de un túnel, pero tampoco lo descartaba. Pero el plan inicial, sin paso subterráneo para vehículos, plantea inconvenientes desde el punto de vista del tráfico, pues se cortaría de raíz todo el flujo de circulación que ahora se desplaza desde la zona Sur hacia el Norte de la ciudad. Hoy en día pasan por allí 8.000 vehículos privados y 500 autobuses, que se quedarían sin una salida natural hacia la avenida del Cid.

El túnel de doble sentido resolvería esos problemas. Es verdad que durante las obras -en torno a 26 meses- el tráfico quedaría desviado por San Lesmes, pero después el paso subterráneo absorbería no solo el tráfico que en la actualidad pasa por la calle Santander, sino también los vehículos que transitan por San Lesmes (dirección Sur-Norte), de manera que este vial podría ser peatonalizado sin problemas, tal y como plantea la intervención global.

Los estudios de tráfico que ha realizado la empresa Colin Buchanan Consultores avalan la solución del túnel. Tras la labor de campo, con la instalación de medidores de aforo en las calles del entorno, han llegado a conclusiones relevantes desde el punto de vista de la movilidad. Con la infraestructura bajo tierra ya en funcionamiento, los vehículos que completen el recorrido de norte a sur (de avenida del Cid hacia la plaza del mismo nombre) se ahorrarían cuatro minutos y medio, pues ya no tendrían que ir hacia San Lesmes. En el sentido opuesto los conductores ganarían 2,30 minutos. Los tiempos de ruta se mejoran en un 75% tanto para vehículos como para peatones.

La peatonalización no solo beneficiará a los conductores, según esos informes, sino también a los viandantes. Estos tardarán menos tiempo en completar sus recorridos porque no tendrán que esperar en los pasos de cebra con semáforo situados a lo largo de la calle Santander. Y también ganarán en seguridad. 

Entre dicho vial, el pasaje de Radio Popular y calle San Lesmes (estos se peatonalizarían en una fase posterior) hay un total de doce intersecciones de pasos de peatones con calzada para coches, con puntos peligrosos, como el situado entre el puente sobre el río Vena y la plaza de San Juan o el ubicado en el giro desde avenida del Cid a Plaza de España.