El Longevida San Pablo está encadenando un desafío tras otro en esta primera quincena de marzo. Después de superar al Estudiantes en su casa y llevarse un agónico derbi ante el Tizona, visita hoy -20.30 horas- la pista del Força Lleida, una de las más complicadas de la LEB Oro y, a priori, la salida más difícil que le queda hasta el final de la liga regular. Ganar es la única opción si aspira a seguir soñando con el ascenso directo.
El equipo azulón se ejercitó ayer por la mañana en El Plantío y puso rumbo a Lérida por la tarde con los 12 jugadores con ficha federativa formando parte de la expedición. Siim-Sander Vene había sufrido unas molestias en la rodilla durante el derbi, pero parece haber quedado en un susto y Lolo Encinas podrá contar con todos.
El objetivo burgalés no es otro que sumar la victoria para seguir vivo en la lucha por la primera plaza, un reto que no se antoja para nada sencillo, pues solo el Tizona y el Coruña han sido capaces de ganar en el Barris Nord en lo que va de temporada. «Es una de las canchas más difíciles de la liga porque el público está muy encima, aprieta mucho, y porque juegan muy bien al baloncesto», aseguró Encinas, quien alabó el trabajo de Gerard Encuentra al frente del banquillo local.
El Lleida viene de ganar sus últimos cuatro compromisos ligueros y la última vez que compitió en casa le dio un serio correctivo (93-79) al Estudiantes. En las dos últimas jornadas, venció a domicilio al Oviedo y al Ourense, lo que ha permitido seguir la estela de los mejores. A estas alturas, ocupa la quinta posición con 16 triunfos, solo uno menos que el San Pablo, y su principal objetivo es lograr el 'factor cancha' en el play off de ascenso.
Entre sus hombres más relevantes, cabe destacar la figura de Cameron Krutwig, un ala-pívot que llegó a Lérida en noviembre y que se ha convertido en uno de los grandes referentes de su equipo. Promedia 9 puntos, 6.8 rebotes, 3.3 asistencias y 16.8 créditos de valoración. Junto a él, sobresalen el escolta Kenneth Hasbrouck, Rafa Villar en la dirección o Kur Kuath como pívot. Sin olvidarse del exazulón Javi Vega, que está tirando muy bien esta campaña y que no estuvo en el Coliseum por lesión (79-66).
Más allá del rival, el San Pablo tendrá que medirse también a sí mismo y al cansancio solo cuatro días después de haber jugado un derbi muy intenso y con dos prórrogas, pero Encinas se mostró confiado en el «cambio de mentalidad» del vestuario y dio algunas claves para ganar. «Hacen un baloncesto dinámico y son muy buenos sin balón. No hay que tener pérdidas porque vuelan tras recuperación», concluyó el donostiarra, que auguró un duelo parecido al derbi burgalés en cuanto a intensidad.