Todo un historial médico

G.G.U. / Burgos
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El Colegio inauguró ayer la exposición que homenajea a la profesión con un recuerdo a veinte pioneros, a los hitos desde 1899 y peculiares materiales originales. Hasta el 14 de noviembre

José Manuel López Gómez (izda.) explica detalles del despacho médico original de Emilio Giménez Heras. - Foto: Alberto Rodrigo

Quienes todavía no sepan por qué hay en Burgos un parque llamado Doctor Vara, una calle dedicada a Felisa Martínez o un centro de salud con el nombre de Ignacio López Saiz tienen ocasión de despejar dudas en la segunda planta del Fórum y, de paso, profundizar así un poco en la historia de la Medicina desde 1899 hasta ahora, que no puede disociarse de la de la provincia y ni de la de los burgaleses. Y ese es, precisamente, el objetivo del Colegio de Médicos con el montaje de una muestra que homenajea a la profesión y a todos sus protagonistas, facultativos y pacientes, con motivo de su 125 aniversario. Podrá visitarse hasta el 14 de noviembre (entrada libre).

«Es una oportunidad de exponer los hitos de la Medicina en este tiempo y de evidenciar el avance y el compromiso de la profesión médica en su conjunto», recordó el presidente de la organización, Joaquín Fernández de Valderrama, ayer en la inauguración.

La muestra está comisariada por los máximos expertos en historia sanitaria de la provincia: los facultativos jubilados José Manuel López Gómez (a su vez cronista de la ciudad) y Martín de Frutos. Su pasión es conocida y reconocida, pero ayer hicieron gala de su saber ante las muchas autoridades que acudieron a la apertura y supieron -o recordaron- las razones por las que los tres facultativos citados en el primer párrafo tienen una calle: Rafael Vara, hijo de burgalesa, neurocirujano, fisiopatólogo e investigador de renombre en la primera mitad del siglo XX; Felisa Martínez, primera burgalesa en licenciarse en Medicina y en alojarse en la Residencia de Señoritas de Madrid antes de la Guerra; Ignacio López Saiz, referente de la Psiquiatría en Burgos, que falleció asesinado en 1986... Estos pioneros dan la bienvenida al público, en un espacio que comparten con otros 17, la mayoría varones, especialistas que destacaron por algún motivo en los tiempos en los que el Colegio de Médicos de Burgos iniciaba su andadura, a finales del siglo XIX.

Entre las autoridades estaba el consejero de Sanidad, Alejandro Vázquez -nefrólogo colegiado en Burgos- quien aprovechó su intervención para destacar el papel de los Colegios como «instituciones de derecho público» con triple cometido: garantizar que quienes ejercen la Medicina cumplen los requisitos para ello, fomentar la formación continuada y la investigación y ejercer de garantes de la ética en la profesión, «científica pero muy humana» (...).

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