La decisión de la Junta de incluir a los dos colegios de Briviesca en el listado de centros que este curso cuentan con aulas gratis de 0 a 3 años ha repercutido en que el número de plazas de Infantil se hayan duplicado con respecto a anteriores anualidades y la ocupación de estas se haya disparado. La guardería municipal La Milagrosa, clausurada definitivamente desde el mes de agosto, ofrecía en total 39 matrículas, mientras que entre las escuelas Juan Abascal y Mencía de Velasco la oferta asciende a 73.
Este incremento ha supuesto un revulsivo para las familias que en otras ocasiones no disponían de espacio en las instalaciones de la ciudad, y a día de hoy el número de plazas ocupadas alcanza las 53. El Mencía de Velasco, el más alejado del casco histórico ubicado junto a los polideportivos, cuenta con un aula para cada curso del primer ciclo de Infantil (de 0 a 1 años, de 1 a 2 y de 2 a 3), mientras que el Juan Abascal con dos, una unidad mixta para alumnos de 0 a 2 años y otra para los de 2 a 3.
La ratio para la unidad mixta del colegio más céntrico de la ciudad es de 13 (cunas y no cunas), y hay 9 alumnos matriculados -uno de ellos bebé-, y la del aula de los mayores de 20, y hay 10 usuarios. La cifra de técnicos de Educación Infantil también ha aumentado a tres, que cuentan con el apoyo de un responsable de centro.
En el Mencía de Velasco las condiciones «han mejorado bastante respecto a las del curso pasado», declara a este periódico David Lafuente, director del centro. La implantación del programa de gratuidad de la Junta de Castilla y León en las instalaciones se dio el pasado curso, y a pesar de que comenzó solo con un aula «en la que estaban mezclados los menores de diferentes edades», recuerda el docente, «acabaron por desdoblarla en dos», añade. En la actualidad, la mitad de los puestos escolares de la clase de 0-1 años se han cubierto (4 de 8) y apenas quedan libres 4 en la de 1-2 (13 en total). La pasada semana, antes del inicio de las clases, ya no quedaban huecos libres (19 en total) en el aula de los alumnos de Infantil más mayores.
Además de disponer de espacios totalmente renovados, el número de docentes para este ciclo se ha doblado respecto al curso anterior. «Tenemos un equipo compuesto por 6 técnicos y una responsable de centro contratada a jornada completa, por lo que la atención ha prosperado», recalca Lafuente.
El incremento de nacimientos en la capital burebana durante este año -que supera el medio centenar, la cifra más elevada de la última década- también repercute en que más familias demanden el servicio. En el lado opuesto se encuentra la guardería municipal de Oña, que por el momento solo cuenta con dos usuarios aunque esperan recibir más en las próximas semanas.
Mejoras. La incorporación de las nuevas unidades de Infantil ha requerido adaptar las instalaciones de ambos centros educativos. La Junta ha financiado las actuaciones ejecutadas para transformar la sala de profesores y un aula en una nueva zona destinada a los más pequeños en el Mencía, y a pesar de que falta por recibir parte del mobiliario, el Ayuntamiento ha repartido el de la antigua guardería y ha invertido 26.650 euros en eliminar las humedades del zócalo.
También ha destinado 17.811 euros en que la empresa Loimetc-aplicaciones repare e impermeabilice la marquesina del patio del Juan Abascal. La institución regional ha costeado la adaptación de la planta baja del edificio de Educación Infantil en dos espacios.