Sube la tensión en Milagros a cuenta de la planta de biogás que una empresa tiene previsto construir en el polígono industrial de esta localidad ribereña. Desde la asociación de vecinos que se ha creado en oposición a este proyecto piden la dimisión de la corporación municipal «debido a su falta de transparencia y su gestión negligente», según expresan en un escrito. Esta exigencia llega después de la manifestación y el pleno que se celebraron este miércoles en el Consistorio. Lamentan que «sólo ocho personas pudieron acceder» y critican que el alcalde, Pedro Luis Miguel, «llegó a insultar a uno de los ciudadanos presentes» e «intentó cerrar el pleno de manera autoritaria, repitiendo varias veces que 'se acababa cuando él lo decía'». 

Por su parte, el regidor de Milagros asegura que la sesión resultó «imposible de controlar» y que los presentes «no respetaron los turnos de palabra». En este sentido, recuerda que es potestad del alcalde dar la palabra a los asistentes al final del pleno, como así hizo. «Pero uno hablaba por un lado, otros por otro...», relata, al tiempo que lamenta que recibió «insultos desde que subía por la escalera». 

Los efectivos de la Guardia Civil estuvieron presentes desde el principio y Miguel, al ver que la situación no se calmaba, planteó la finalización del pleno. «Fue un disparate total», concluye.