La Arandina y la derrota se han convertido en la perfecta definición de antónimos. Los flamantes campeones cumplieron el pasado sábado un año sin perder y tienen la posibilidad de alargar esta dinámica aún más si logran puntuar en la última jornada frente a la Ponferradina B.
Este círculo de imbatibilidad arrancó el pasado 15 de abril de 2021. Por aquel entonces, la Arandina sufría una de las derrotas más agridulces de la temporada. Los pupilos de Álex Izquierdo veían prácticamente opacadas sus opciones de play off después de caer por 3-1 ante el Numancia B. Juan del Rincón neutralizó el gol de Mario Álvarez, pero Dani Fernández y Adrián Pelaez sentenciaron el encuentro en la Ciudad Deportiva Francisco Rubio.
A partir de ese Viernes Santo, los blanquiazules no han vuelto a saborear la derrota en liga. La Arandina cerró la temporada con dos victorias frente a Ciudad Rodrigo (3-1) y Atlético Astorga (0-3), pero insuficientes para colarse en los cinco primeros puestos. Tras un verano de reflexión y de apuesta por el bloque de esa misma temporada (Uli, Fer, Zazu, Vitolo, Santa, Isra, Álex Gómez, Koke, Dango, Átomo, Chirola y Ayoub), los ribereños afrontaron con la máxima ilusión la 22/23. Una campaña que acabaría siendo histórica a pesar de no partir como favoritos a consecuencia de la presencia de colosos del nivel del Salamanca CF UDS o Real Ávila.
Después de un duro varapalo en la Copa RFEF, la Arandina debutó con la mejor de las sensaciones en La Albuera. Isra, Zazu y Átomo tumbaron a un recién ascendido Unami (3-0). Sin embargo, el primer susto llegaría en la segunda jornada ante el Real Ávila (1-1). Jorge Rodríguez se vistió de héroe e igualó la balanza en el tiempo de descuento tras una embarullada jugada en el área. Tras unos meses de octubre y noviembre a nivel sobresaliente, llegó uno de los meses clave para la consecución del título. La Arandina recibía a Salamanca, Astorga y Mirandés B con un historial acumulado de seis triunfos y dos empates en los dos meses anteriores.
Y las vacaciones navideñas no pudieron ser mejores. Nueve puntos de nueve posibles. Los tres partidos con un factor común: sufrir para vencer. La Arandina conquistó La Eragudina (0-2) y El Ence (2-3), con un asalto ganado en El Montecillo ante el Salamanca CF UDS (2-1). Sin embargo, la cuesta de enero no tardaría en hacer de las suyas: cuatro empates en los cinco primeros partidos de 2023. Recorte de puntos que no sólo no se trasladó en nerviosismo, sino en una motivación extra. Tras el empate en Almazán (1-1), la Arandina acumuló hasta seis victorias consecutivas en las que registraron cinco porterías a cero. Únicamente el Atlético Bembibre (1-2), logró batir la racha de Roberto Jara.
El Numancia B cortó esta dinámica con un resultado gafas (0-0), que no afectaría en nada a las aspiraciones de título de la Arandina. El mes de abril trajo consigo dos 'match-ball'. El primero de ellos en El Helmántico ante el todopoderoso Salamanca CF UDS. Con un penalti errado, varias ocasiones claras y un jugador menos, Pesca tiró de casta para evitar el fin de este anecdótico círculo de imbatibilidad. El zaguero ribereño limpió las telarañas de El Helmántico con un potente libre directo y dejó en bandeja el posible ascenso en el Juan Carlos Higuero ante el Atlético Astorga, segundo clasificado. Y a la segunda iría a la vencida en una auténtica fiesta. La plantilla de Álex Izquierdo arrolló sin piedad a los maragatos y se aseguró algo más que una categoría superior: la de que el pasado sábado se cumpliera un año natural sin perder.
Una vez más, la Arandina continúa alcanzando cifras históricas y tiene en la palma de su mano lograr el título de campeón invicto. Tras 19 victorias y 10 empates, los de Álex Izquierdo pueden redondear su estancia en la quinta división nacional.