CEOE exige tutores compartidos en micropymes con alumnos de FP

SPC
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La patronal reconoce que la "improvisación" y la "premura" del Ministerio de Educación por poner en marcha la ley este año ha generado "bastante incertidumbre y miedo" entre las compañías

Encuentro empresarial en Valladolid para analizar el impacto de la nueva ley de Formación Profesional. - Foto: Miriam Chacón (Ical)

La Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) de Valladolid consideró hoy "vital" que las micropymes que reciben alumnos en prácticas de Formación Profesional (FP) compartan un tutor de empresa, ya que es "imposible" que destinen una persona para realizar estas funciones. Además, reclamó algún tipo de compensación, que no tiene por qué ser económica, para las compañías que formen a esos estudiantes en sus centros de trabajo.

La Comunidad tiene este curso escolar un total de 47.000 alumnados matriculados en ciclos de FP de diferentes ramas, que deberán comenzar a partir de febrero sus prácticas, una vez superada la formación en prevención de riesgos laborales, "siempre y cuando" haya empresas suficientes en el entorno cercano al centro educativo para dar ese desarrollo formativo.

Con motivo de un desayuno empresarial sobre la Ley de Formación Profesional en Castilla y León, el presidente de la Comisión de Educación de CEOE Valladolid, Ángel Martín, señaló que la encuesta enviada a sus socios entre los meses de septiembre y octubre reveló que las empresas más pequeñas desconocían la nueva normativa. "Es muy difícil que una empresa con uno o dos trabajadores pueda emplear medios para prestar una formación a los estudiantes de FP, a diferencia de lo que ocurre con las medianas o las más grandes que cuentan con una infraestructura mayor, con un departamento de Recursos Humanos", aseveró. De ahí que pidiera un mayor apoyo para las pymes y micropymes y conocer el papel que van a jugar las organizaciones empresariales en todo este proceso.

No en vano, Martín recordó, según recogió la Agencia Ical, que con la nueva Ley de FP entre un 25 y 35 por ciento de la formación de los ciclos se tiene que prestar en una empresa, que se traduce entre unas 500 y 700 horas. "Son muchas horas en una empresa por que, además, tiene que haber un tutor de empresa que se dedique a hacer esas labores de formación", sentenció. Además, precisó que ese tutor requiere de una formación, por lo apostó por que esa compañía tenga algún tipo de apoyo y recursos, no solo de tipo económico.

El presidente de la Comisión de Educación de CEOE Valladolid reconoció que la "improvisación" y la "premura" del Ministerio de Educación por poner en marcha la Ley de FP este año ha generado "bastante incertidumbre y miedo" entre las empresas. En todo caso, subrayó que los empresarios están "muy abiertos" a la implantación de la nueva norma por que necesitan mano de obra.

Entre 500 y 700 horas de formación

El director general de Formación Profesional y Régimen Especial de la Consejería de Educación, Agustín Sigüenza, incidió que una de las grandes novedades de la nueva Ley de FP es la corresponsabilidad que se otorga a las empresas, que, por primera vez, aparecen como actores principales del proceso normativo. No en vano, parte de la formación de un alumno tiene lugar en la propia compañía.

En concreto, se pasa de las 360 horas de prácticas que hacía antes un estudiante de FP a entre 500 y 700 horas, al suponer entre un 25 y 35 por ciento del total de las 2.000 horas de formación de un ciclo. Una ampliación que, según él, genera dudas e incertidumbres por que las empresas no saben cómo prestar esa formación.

Sigüenza recordó que el 98 por ciento del tejido empresarial de Castilla y León es una compañía con menos de diez trabajadores, lo que dificulta contar con los recursos humanos y materiales para asumir ese compromiso formativo. Añadió que la Comunidad cuenta con unas 140.000 empresas, de las que 84.000 no tienen asalariados. Es decir, son autónomos. Pese a ello, destacó que se requiere la participación de todas las compañías, pequeñas, medianas y grandes, lo que obliga a buscar soluciones.

Algo que, manifestó, no puede perjudicar, en ningún momento, la productividad de la empresa. Además, declaró que la formación es un elemento clave para mantener su competitividad y apostó por que las empresas mantengan al personal con las cualificaciones y la formación necesaria para afrontar los retos del siglo XXI.

Sigüenza añadió que corresponde a las comunidades autónomas implantar "todo" lo que está contemplado en la Ley Orgánica, incluida la normativa de desarrollo, de acuerdo a un calendario. "Estamos haciendo un cambio legislativo muy importante, que introduce muchos cambios, por que hay que rehacer toda la normativa que tenemos en el ámbito autonómico para la FP", expuso. En este sentido, apuntó que está "casi" finalizado el proceso, aunque precisó que van un "poco tarde" ya que el Ministerio publicó la normativa básica el pasado 28 de mayo. Todo ello, añadió, requiere de un periodo determinado al señalar que un decreto no se publica en tres meses, pero han acelerado "al máximo" los trámites para publicar la normativa "en breve".

El director de Banca Instituciones de CaixaBank, Gonzalo Cebrián, valoró la importancia de este tipo de jornadas, de la mano de la CEOE y la Junta, con una nueva Ley de FP que apuesta por una formación dual, que vendrá a "solucionar" o "mitigar" la brecha que siempre ha existido entre los estudios y la realidad laboral de las empresas.

No en vano, se refirió a la revolución del mercado laboral, ya que los expertos hablan de que, en el horizonte de una década, una cuarta parte de las oportunidades laborales estarán relacionadas con la FP Dual, que se traduce en unas 150.000 ofertas para los jóvenes y los "no tan jóvenes".