Los accidentes provocados por animales se duplican en un año y suman 1.600

Gadea G. Ubierna / Burgos
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Pasos de fauna. Ecologistas, cazadores y expertos en seguridad vial piden que se habiliten más zonas de tránsito en la red secundaria, en la que se concentra el 78% de los siniestros

 
Los accidentes por atropello de animales en las carreteras burgalesas casi se han duplicado en un año al pasar de los 800 contabilizados a fecha de noviembre de 2011 a los 1.608 de todo el 2012, según los últimos datos oficiales disponibles y facilitados por la Subdelegación del Gobierno en la capital. Esta cifra vuelva a situar a la provincia de Burgos a la cabeza de la región -y entre las primeras de España, junto con Lugo, León o Soria- sin que se hayan tomado medidas concretas y eficaces para tratar de reducir la presencia de animales en las carreteras y evitar siniestros que, como ocurrió en 2011 y en 2012, pueden provocar muertos. En este sentido, tanto los expertos en seguridad vial como cazadores y ecologistas coinciden en que es imprescindible habilitar más pasos de fauna en la red de carreteras y, sobre todo, en las secundarias, que es donde se concentra este tipo de siniestros.
Octubre y noviembre son los dos meses con mayor incidencia de accidentes de estas características, en gran medida porque es temporada de caza, los animales se desorientan y saltan a las carreteras con mayor frecuencia que en otras épocas. Sin embargo, aunque el riesgo de chocar con un corzo o un jabalí se multiplique durante estos dos meses, lo cierto es que las cifras de siniestralidad durante todo el año por este motivo evidencian que hay otras causas. De ahí que la Delegación del Gobierno en Castilla y León anunciara la pasada primavera que se iba a «impulsar la comisión de estudio para la evaluación y propuesta de medidas en relación con los accidentes provocados por animales». Hay que tener en cuenta que solo en 2012 hubo 6.609 accidentes por este motivo en la región, de los cuales 1.608 (un 24,3% sobre el total) se produjeron en Burgos, 1.420 en León (21,4%) y 891 en Soria (13,4%). Y dado que cada año hay más siniestralidad con animales, también se incrementan las cifras de víctimas: el año 2012 se saldó con 200, de las cuales 3 fueron mortales y una de ellas en la provincia de Burgos. Lo mismo que ocurrió en el año 2011. 
Así, aunque no se ha especificado en qué va a consistir el «impulso», la Delegación del Gobierno indicó que la comisión de estudio consistirá en un grupo de trabajo que analizará propuestas y medidas a tomar en materia de señalización de carreteras y medidas de protección de la fauna, responsabilidad civil, control demográfico de especies en expansión, así como en la información y sensibilización de conductores. En muchos de los accidentes con víctimas, el conductor resulta herido no tanto por el choque como por la maniobra realizada para esquivar al animal que ha aparecido de repente. 
 
causas. Son varios los factores que inciden en el cada vez mayor número de accidentes con animales en la provincia y en la región. Por una parte, tanto ecologistas como cazadores y expertos en materia de seguridad vial coinciden en que hay pocos pasos de fauna para canalizar los movimientos migratorios o la libre circulación de especies salvajes, y los que hay no siempre están en el sitio correcto. Un estudio elaborado por el Real Automóvil Club de Cataluña (RACC) en 2012 (aunque con datos de 2004) a petición del Gobierno concluyóque el 78% de los accidentes por atropello de animales se produce en la red secundaria. Sin embargo, los pasos de fauna u otras medidas semejantes suelen instalarse en autopistas o autovías, calzadas en las que la incidencia de siniestralidad por este motivo es mucho menor.
Como en la mayoría de los accidentes, otra de las causas es el exceso de velocidad o la distracción del conductor, de manera que es incapaz de reaccionar cuando aparace un jabalí o un corzo en la carretera. El presidente de la Federación de Caza de Castilla y León, el burgalés Santiago Iturmendi, apunta que «en la provincia, en las carreteras de la sierra hay poquísimos accidentes de este tipo y en la de Soria, en cambio, hay montones. ¿Por qué? Porque es una recta y se corre». De ahí que considere imprescindible restringir más el límite de velocidad en tramos con mayor riesgo y, sobre todo, «en el norte de la provincia, en el Valle de Mena y en la Merindad de Montija».
Otra de las causas destacadas por este cazador es la falta de limpieza de las cunetas y la permisividad de la Administración con agricultores que siembran cultivos de porte alto como el maíz «casi hasta el mismo asfalto, lo cual impide ver llegar al animal». De ahí que Iturmendi considere imprescindible que en carreteras como la de Soria y, en general, en todas las de la red secundaria, «se limpien 50 metros de cuneta para mejorar la visibilidad».