Elady Zorrilla fue el fichaje más controvertido que hizo el Burgos CF en el mercado de invierno. Las dudas sobre su estado físico surgieron nada más llegar, aunque en media hora ante el Racing de Santander las disipó. «Hablo en el campo porque no puedo hacerlo de otra manera. Supondría entrar en un debate con cada persona. Que si estaba gordo, que si estaba medio retirado… No voy a estar hablando de esas cosas con gente que no conozco», explica. No obstante, sus antecedentes más recientes no eran los mejores y es que venía de no jugar en el colista del grupo 2 de Primera RFEF, el Intercity. También explica de forma sincera lo que le sucedió en Alicante. «Sentía que no era donde me merecía estar después de la segunda vuelta que hice con el Huesca y eso provocó que se me bloqueara de cabeza», comenta.

¿Cómo vivió el revuelo que hubo con su llegada al club?
No soy una persona que esté pendiente de las redes sociales. Estaba centrado en venir al Burgos en el momento que se dio la posibilidad. Me aferré a ello y rechacé otras opciones, porque quería volver a trabajar con este cuerpo técnico. Estaba convencido de que se iban a dar bien las cosas y que iba a poder fichar.

¿Contestó a los que tenían dudas en sus primeros 30 minutos como blanquinegro ante el Racing?
Que si estaba gordo, que si estaba medio retirado… Hablo en el campo porque no puedo hacerlo de otra manera, ya que supondría entrar en un debate con cada persona. No voy a estar hablando de esas cosas con gente que no conozco. Me interesa lo que diga mi mujer, mi familia, mi entrenador y mis compañeros. Ni Michu, ni Ramis quieren tirar piedras sobre su tejado, porque quieren al Burgos y se están jugando su puesto. Ellos no van a traer a un equipo profesional a un jugador que no esté bien físicamente o casi fuera del fútbol. Cuando llegué les dije a todos que estaba para jugar ya. Creo que lo demostré ese domingo y hubo gente del cuerpo técnico que tras el partido me dijo que se alegraban mucho por mí. Me conocen y saben que puedo estar mejor o peor, pero también son conscientes de que voy a ir a muerte en cuanto tenga la mínima oportunidad, y eso es lo que quieren ellos.

Elady Zorrilla llegó al Burgos CF en el mercado de invierno y ha aportado en los partidos ante el Racing y el Zaragoza. - Foto: Valdivielso

¿Comienza esta nueva etapa con la sensación de que va a volver a disfrutar?
Ya estoy disfrutando. Me pagan por entrenar, vengo y hago mi trabajo entre semana lo mejor que puedo. Salir los domingos a jugar es un premio al trabajo diario. Espero disfrutar cada día más porque soy muy ambicioso. Estoy seguro que a mí y al club nos queda una etapa bonita por vivir. El fútbol es muy caprichoso.

Llegó hace dos semanas, pero parece que lleve media vida en Burgos.
Tengo yo también una sensación parecida. Me decía un compañero que aunque solo llevo catorce días parece que estoy con ellos hace dos años, aunque igual lo decía porque hablo mucho. Me encuentro muy a gusto en el vestuario, también haber trabajado ya junto al cuerpo técnico te hace más fácil todo. Sé lo que quieren y eso acelera la adaptación.

¿La mala experiencia en Alicante hace que llegue a Burgos aún más motivado?
En el Intercity no rindo porque mi cabeza no está como tiene que estar. No fui feliz. Sentía que no era donde me merecía estar después de la segunda vuelta que hice con el Huesca y eso provocó que se me bloqueara de cabeza. En el momento en el que Ramis y su cuerpo técnico llegan al Burgos les dije que si en algún momento pensaban que podía ayudar vendría con todas mis ganas.

Elady Zorrilla, ayer en la ciudad deportiva de Castañares. - Foto: Miguel Ángel Valdivielso

¿Cómo acaba en Alicante?
En verano rechacé dos ofertas de Segunda por esperar a otra oportunidad que me gustaba y todo se complicó. La mejor opción económica y deportiva que tenía al final del mercado era el Intercity, donde no pude ayudar lo que me hubiera gustado.

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¿Tiene la sensación que este Burgos es mejor de lo que dice la clasificación?
Creo que las cosas no suceden por casualidad. El Burgos está donde tiene que estar. Las clasificaciones no mienten y estamos en esta situación porque habrá cosas que no hemos hecho bien.

Aunque parece que la dinámica va cambiando.
Los resultados son los que cambian todo. Hemos ganado dos partidos seguidos, pero seguimos en la misma mierda, no puede haber relajación. Los rivales también suman y seguimos un puesto por encima del descenso, por lo que tenemos que ganar el domingo. En el fútbol profesional es difícil ganar tres partidos seguidos, pero hay que hacerlo, porque estamos capacitados para ello. Queda mucho. Tenemos que saber sufrir, en los momentos malos debemos agarrarnos y en los buenos seguro que cada día nos vamos soltando más y estaremos mejor con balón, porque eso al final te lo da la tranquilidad.

¿Qué le pareció lo que se vivió en El Plantío en el choque contra el Racing?
Me encanta el ambiente que hay en El Plantío. De los campos que más me han sorprendido por sus aficiones han sido los de Burgos y Santander. Necesito esa presión de que tu gente te empuje cuando las cosas van bien y que te piten cuando van mal.

(La entrevista completa, en la edición impresa de este jueves de Diario de Burgos o aquí)