Julián Calero aseguró el pasado sábado, horas antes del partido contra el Huesca, que las conversaciones para su renovación van «muy bien» y desveló la celebración de una reunión entre su representante y Michu, director deportivo del club. En dicha conversación el máximo responsable del Burgos trasladó al agente del entrenador la idea de ofrecer un  contrato a Julián Calero de dos temporadas, el mismo que tiene el propio Michu y su equipo de colaboradores con el club burgalés. 

Realmente ese es el único avance de unas negociaciones que en realidad ni se han iniciado. El Burgos Club de Fútbol aún espera saber si Calero quiere seguir en el club o no, y lo quieren saber cuanto antes, durante este mes de abril, para avanzar en el proyecto de la próxima temporada. Sin embargo, el entrenador aún no ha dado ninguna respuesta para comenzar de verdad las conversaciones sobre su posible continuidad. Es más, en sus palabras del pasado sábado fue bastante claro. «No tenemos prisa», aseguró. Postura bien diferente hay en el club, que sí quiere conocer cuanto antes la postura del entrenador madrileño.

«Nosotros no nos hemos reunido con ningún otro entrenador. Nos gustaría que siguiese (Calero) pero necesitamos conocer su decisión lo antes posible para seguir avanzando en el proyecto de la temporada que viene, independientemente de la categoría del fútbol profesional en la que militemos», aseguró Michu a este periódico.

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