Un correo electrónico alertó a la empresa The Phone House de que había varios empleados que, supuestamente, estaban utilizando una promoción para suscribir seguros de teléfono sin el permiso o conocimiento de los clientes. Tras una auditoría interna, la compañía detectó que una dependienta de la tienda ubicada en un centro comercial de la ciudad estaba entre los trabajadores que llevaban a cabo estas prácticas fraudulentas, por lo que decidieron despedirla. El asunto llegó a los tribunales, que han decretado la procedencia de la extinción del contrato.

Los hechos se remontan a 2022, según consta en una sentencia de la Sala de lo Social número 1 del Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León. La empresa llevó a cabo una investigación interna en la que comprobó que una trabajadora que llevaba ocho años contratada utilizaba «cuentas bancarias que no correspondían con el cliente a quien suscribían una póliza de seguro sin que éste tuviera conocimiento y sin siquiera autorizarlo». 

Dicho seguro estaba dentro de una promoción que lanzó la compañía en julio de 2022 que consistía en dar un mes gratis por la compra de un terminal telefónico pero que tenía en realidad una vigencia de cinco años. La trabajadora, concluyó la auditoría, era «plenamente conocedora del procedimiento de venta y suscripción, así como de la firma digital en materia de gestión de contratos y servicios», por los que incluso realizó unos cursos de formación.

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