Qué mejores fechas que estas, previas a la Navidad, para que los vecinos de la capital rindan homenaje a los mejores de los nuestros, a aquellos conciudadanos e instituciones de los que la ciudad debe sentir un especial orgullo por contribuir a hacer más grande el nombre de Burgos. En la décima edición de los Premios Ciudad de Burgos, los correspondientes al bienio 2020-2021, fue reconocida a título póstumo María Cruz Vela, en la categoría de Convivencia. El jurado valoró de ella toda una biografía dedicada a reivindicar los derechos de los más desfavorecidos, trabajando por las madres solteras, luchando por sacar del mundo de las drogas a los adictos adictos burgaleses y promoviendo numerosos proyectos de cooperación en países de África, como Costa de Marfil o Camerún. Su sucesor como presidente de la asociación Ambó África, Donato Miguel Gómez, destacó de ella su «amor incondicional por las personas, sobre todo por las más necesitadas y por las más vulnerables». El alcalde, Daniel de la Rosa, subrayó su «determinación y espíritu de lucha» para conseguir fondos de la Administración en favor de sus proyectos por los más desfavorecidos.   

El galardón en reconocimiento de la institución más creativa fue a parar a Fundación Círculo, por su labor en el desarrollo y la difusión de la cultura en la sociedad burgalesa, ponderando el equilibrio entre artistas locales y figuras consolidadas en el ámbito nacional. Como señaló ayer el regidor municipal, «ha conseguido significarse» en una ciudad con gran iniciativa cultural. Su presidente, Emilio de Domingo, destacó que el propósito de la Fundación no es otro que «llevar a todos los burgaleses una oferta variada y gratuita, porque lo creativo contribuye a potenciar la sensibilidad y a excitar la conciencia crítica».

Benoît Mocquant, anterior director de la planta de L'Oréal en Villalonquéjar, fue distinguido con el premio de Desarrollo Sostenible, por su trabajo para conseguir que la fábrica burgalesa sea autosuficiente desde el punto de vista energético, además de ser la impulsora de la red de calor en el sector industrial más importante de Castilla y León. Solo tuvo buenas palabras para Burgos, de la que alabó «el nivel de profesionalidad» de sus gentes y la «dinámica empresarial, que es fuera de lo común». 

El público del Fórum se puso en pie cuando empezó a sonar el himno de Burgos. - Foto: Valdivielso

El rector de la Universidad Isabel I de Castilla, Alberto Gómez Barahona, recogió el galardón al Conocimiento y la Innovación, porque en solo 10 años, y a través de los más novedosos medios de enseñanza on line, ya se han titulado en esta institución más de 45.000 alumnos de 50 países. «Todo ello ha sido posible gracias a un equipo que hoy está formado por más de 800 personas y en un contexto en el que no recibimos ninguna ayuda pública», afirmó Gómez Barahona. El alcalde, Daniel de la Rosa, indicó que «es muy positivo que en Burgos convivan dos universidades, incluso 3, con la UNED».

Y qué institución si no el Burgos CF se iba a llevar el premio al Embajador de la ciudad, después de subir a segunda división del fútbol español, consolidarse y haciendo soñar a sus aficionados, en esta temporada, con retos mayores. Como destacó el presidente de la Fundación del Club, Julián Alonso, el Burgos «ha sido una marea en el Sardinero, portada en la BBC, y toda Europa habla de él gracias a su gran defensa y a encajar muy pocos goles». De la Rosa, ferviente hincha del equipo, dijo que es «el mejor vehículo de promoción» de la ciudad y prometió seguir apoyándolo económicamente.