El Burgos está en un mal momento. Lleva seis jornadas sin ganar, solo ha sumado tres puntos de 18 posibles, y estos números lo han alejado de la sexta plaza y ese sueño de disputar el play off de ascenso. Su crisis no es tanto de juego como de resultados. Su falta de gol empieza a ser alarmante y ya no le sirve su solidez defensiva, que la mantiene.

Y en este escenario recibe hoy al Racing de Santander, un rival con objetivos diferentes pero con la misma necesidad de sumar puntos en su lucha por alejarse de los puestos de descenso.

Tanto el entrenador como los jugadores admiten la situación delicada del equipo y, sobre todo, los problemas con el gol. Los dos últimos ejemplos son evidentes, Sporting de Gijón e Ibiza. Contra los asturianos, sin alardes, mereció ganar pero le faltó remate. Y contra el Ibiza fue aún más claro, con una buena primera parte y ocasiones muy claras para haberse adelantado en el marcador. El resultado final fue de un punto sobre seis.

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