Suma y sigue. El coste de limpiar las pintadas que inundan prácticamente todas las calles de Aranda de Duero sube ejercicio tras ejercicio. Si en 2021 el Ayuntamiento de la capital ribereña destinó 36.000 euros de las arcas municipales para eliminar los grafitis, en 2022 esta cifra aumentó a 75.000 euros. Pues bien, en lo que va de año ya se ha superado este importe. Según detalla el concejal de Medio Ambiente, Carlos Medina, el coste del servicio asciende a 85.973 euros hasta octubre. Es decir, un 15% más.
En esos casi 86.000 euros se incluyen gastos de personal, vehículos y material, especialmente decapantes y pintura. Actualmente, hay un peón especialista, que cuenta con un furgón hidrolimpiador. No obstante, durante varios meses de este año se puso un refuerzo con otro operario. Hasta ahora, la plantilla ha llevado a cabo un total de 712 actuaciones para acabar con la plaga de los grafitis que afecta a fachadas de bloques residenciales y comercios, farolas, bancos, portales y hasta buzones. Ningún rincón escapa a la acción de los grafiteros. En total, desde la Concejalía de Medio Ambiente estiman que este año se han limpiado 22.041 metros cuadrados en diversos puntos de la ciudad, especialmente en el centro. Dos de las calles más 'asediadas' por los grafiteros son Prado Marina y Santa Lucía, junto a la Plaza Mayor. De hecho, varias paredes se han tenido que repintar hasta en una docena de ocasiones debido a las incesantes acciones vandálicas. Ahora bien, desde Urbaser, empresa adjudicataria del servicio, remarcan que a pesar de que este trabajo puede resultar "frustrante" no queda otra que limpiar y limpiar.
En este momento, el concejal de Medio Ambiente del Consistorio arandino detalla que hay lista de espera para la limpieza de las fachadas manchadas con grafitis. Toca esperar, pero los vecinos tienen a su disposición este servicio gratuito. Los propietarios se lo pueden pedir directamente al Ayuntamiento, al que deben autorizar para que proceda al borrado de las pintadas.
En paralelo, se está acometiendo una campaña 'puerta a puerta', de manera que el técnico municipal que trabaja como responsable de que se cumpla el contrato de limpieza de las calles realiza recorridos por zonas específicas de Aranda, detecta los grafitis que hay o que han vuelto a aparecer tras limpiar y lo pone en conocimiento de la empresa adjudicataria para que proceda a su borrado. Esta fórmula 'puerta a puerta' se ha puesto en marcha recientemente y también es gratuita para el ciudadano. En el caso de los locales comerciales deben presentar el certificado de que están al día fiscalmente con el Ayuntamiento. Hasta mayo se realizaron 256 intervenciones en fachadas, un 60% más que en 2022.
Tras la pista. En los últimos diez días, varias calles de Aranda de Duero han amanecido con pintadas de gran tamaño y una misma palabra: Vato. Uno de estos grafitis, que mide cerca de dos metros, se halla en la calle Barrionuevo, muy cerca de la iglesia de Santa María; otros dos en el barrio de San Juan y uno más en la calle Mansilla. Fuentes de la empresa encargada de limpiar las pintadas detallan que ya han comenzado a borrarlos y documentarlos para la Policía Local arandina.