El capitán Emilio Pérez Peláez (San Pedro de Ceque, Zamora, 1958), el teniente Marcos Antonio Benito Rodríguez (Madrid, 1964) y el especialista en montaña, José Martínez Conejo (Laguna de Negrillos, 1966) son los tres guardias civiles que fallecieron esta mañana en el municipio leonés de Maraña, donde llevaban a cabo el rescate de un montañero en la zona conocida como la Polinosa, en el Macizo de Mampodre. El trágico suceso tuvo lugar a las 9.00 horas de la mañana, cuando el helicóptero en el que viajaban tocó una pared y se precipitó. Así lo comunicó al Servicio de Emergencias 112 el cuarto integrante del equipo, que salvó la vida porque ya había abandonado la aeronave para encargarse de la inmovilización del montañero el que iban a auxiliar, que se había fracturado un tobillo.
En cuanto se conoció el suceso, el Centro Coordinador de Emergencias de la Agencia de Protección Civil activó el helicóptero de salvamento, que se dirigió a la zona con dos rescatadores, se dio aviso al Servicio Aéreo de Rescate (SAR), a la Guardia Civil y a los bomberos de León y a Cruz Roja, que puso en prealerta sus recursos. Emergencias Sanitarias del Sacyl envió una ambulancia de soporte vital básico y un helicóptero medicalizado. También se comunicó con el 112 de Asturias, que activó un helicóptero de rescate con cuatro personas a bordo. La Guardia Civil de Oviedo envió también otro helicóptero y personal a la zona.
Imagen de La Polinosa, pico donde ha caído el helicóptero siniestrado en Maraña (León). - Foto: Javier Fernández (ICAL)
El amplio dispositivo inició las labores de reconocimiento del aparato siniestrado y se confirmó el fallecimiento de los tres ocupantes, dos pilotos pertenecientes al sector aéreo noroeste con base en La Virgen del Camino (León) -Emilio y Marcos Antonio- y uno del Grupo de Rescate Especial de Intervención en Montaña (Greim) de la Guardia Civil con sede en Sabero (León), José.
Traslado de uno de los cuerpos de los tres agentes muertos esta mañana. - Foto: Carlos S. Campillo (ICAL) El siniestro pudo haber sido más trágico todavía si el sargento que sobrevivió, de 37 años, no hubiera tenido la pericia de llevar hacia sí la camilla en la que estaba el herido al que asistían. Sí lo hizo y ambos pueden contar lo ocurrido. El accidente tuvo lugar en un día que amaneció con niebla pero que presentaba unas condiciones meteorológicas normales en el momento de la tragedia. Ocurrió en una zona, la Polinosa, del Macizo de Mampodre, donde son habituales los rescates al tratarse de un espacio con ciertas complicaciones. En ese entorno se han producido en diversas ocasiones incidentes con montañeros y alguna muerte pero nunca de rescatadores ni con tres víctimas que lamentar. El herido, y superviviente de la caída del helicóptero gracias al sargento que también salvó la vida, había sufrido una fractura en un tobillo y fue trasladado posteriormente al hospital asturiano de Arriondas.
Coraje. El sargento que vio cómo sus compañeros perdieron la vida tras precipitarse el aparato, tuvo fuerzas suficientes para colaborar después en las labores de rescate y recuperación de los cuerpos de los malogrados agentes. Una actitud que elogió hoy el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, quien mañana le impondrá la Cruz al Mérito de la Guardia Civil con distintivo rojo y la Cruz de Oro con Distintivo Rojo de Protección Civil. Son las mismas distinciones que recibirán, a título póstumo, los fallecidos.
También mañana, cuando concluya la capilla ardiente instalada en la Comandancia de la Guardia Civil de León tendrá lugar el funeral por los tres agentes. Será a las cinco de la tarde en la catedral de León y la ceremonia estará presidida por el arzobispo castrense, Juan del Río, y por el obispo de la Diócesis leonesa, Julián López.
Luto en tres provincias. León, Zamora y Madrid son las provincias que recibieron la noticia del fallecimiento de uno de sus hijos en acto de servicio. En la comarca de Benavente, el pequeño pueblo de San Pedro de Ceque reunirá mañana a la corporación local para declarar luto oficial en el municipio. En Laguna de Negrillos, el pueblo natal del rescatador leonés suspendieron hoy la Fiesta de la Alubia, que la localidad celebraba desde el viernes hasta mañana y a la que ayer mismo acudió el guardia civil que horas después perdió la vida en la montaña.
Experiencia contrastada. El ministro recalcó que, al margen de las investigaciones judicial, aérea y de la Guardia Civil, puestas en marcha a raíz de lo ocurrido, la caída del helicóptero es “un accidente que puede ocurrir cuando se trabaja en condiciones de riesgo” y recalcó que el piloto y copiloto tenían miles de horas de vuelo y eran los más experimentados de su departamento. Además, las condiciones climatológicas de la zona eran buenas en el momento de la tragedia, la peor de este tipo que registra el Instituto Armado en una década, recordó Fernández Díaz.