El Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible ha adjudicado, a través de Adif, una inversión de 60,9 millones de euros para la segunda fase de las obras de construcción del complejo ferroviario de Valladolid, proyecto que, junto a la Variante Este, convertirá a esta ciudad en nodo de transporte de mercancías y centro de tecnología e innovación ferroviaria. La primera fase ya se llevó 72 millones.

La actuación comprende la construcción de una nueva terminal de transporte de mercancías, que formará parte de la red de nodos intermodales estratégicos. Esta infraestructura ensombrecerá a la terminal de Villafría, que tendrá la categoría de nodo global en vez de básico, del que sí formará parte el de Valladolid. Este agravio provocará que Pucela reciba más inversión y en menor plazo (año 2030) que Burgos, que optará a menores fondos de aquí a 2050. 

Además se construirá un centro de tecnología de vía, el centro el centro de Redalsa -empresa del grupo Adif especializada en carril y desvíos- y una base de mantenimiento. Los trabajos se han encargado a la UTE Lantania y Copcisa.

De esta forma, están en marcha todas las actuaciones para materializar la Variante Este y el Complejo Ferroviario de Valladolid. Las infraestructuras que remodelarán la red ferroviaria de la ciudad recuperan espacios urbanos con el traslado al nuevo complejo de dotaciones distribuidas en distintos puntos y agilizan el tráfico de viajeros y mercancías, evitando en este último caso su paso por la estación Valladolid-Campo Grande.

Asimismo, se ha lanzado el proyecto de ampliación de capacidad de la estación para convertirla en nodo de la Alta Velocidad del Norte, con el despliegue de la segunda vía de ancho estándar en la salida norte de la estación, respondiendo al crecimiento del tráfico asociado a la extensión de la red y la liberalización del transporte de viajeros.

Todas estas actuaciones que Transportes ha puesto en marcha a través de Adif forman parte del desarrollo del Corredor Atlántico.

Villafría, a la espera. Mientras la terminal burgalesa lleva meses esperando la adjudicación de la redacción del proyecto para la ampliación de dos vías de carga y descarga, proyecto en el que solo se invertirán 5 millones, una diferencia abismal respecto a Valladolid.