Los cerca de 380 alumnos del Colegio Público Santa María de Aranda de Duero tendrán que empezar el curso en unas instalaciones distintas a las suyas. Más concretamente, repartidos entre las aulas del edificio de Las Francesas y las del centro cívico Virgen de las Viñas. Una situación que se explica por las obras de mejora de la eficiencia energética que está previsto que se lleven a cabo para paliar la falta de aislamiento en fachadas, suelos y cubierta, pero que, por la lentitud en los distintos trámites administrativos, no empezarán hasta después de las fiestas patronales de la capital ribereña, es decir, en torno al 20 de septiembre.
Esta circunstancia ha pillado totalmente por sorpresa a la asociación de madres y padres del colegio Santa María. Su presidente, David Blasco, asegura, estupefacto, que nadie les ha informado de estos cambios y no entiende porqué no se ha aprovechado el verano para acometer las obras. Máxime, continúa, cuando en las distintas administraciones involucradas saben "de sobra" que el arranque del curso escolar en Castilla y León está fijado para el viernes 10 de septiembre. "¿Por qué el concurso de licitación no se ha publicado hasta julio?", cuestiona, si bien indica que las mejoras previstas son "muy necesarias" y que desde el AMPA llevaban mucho tiempo reclamándolas ya que en el edificio que alberga las aulas de Educación Infantil, con cerca de 110 alumnos, ha habido goteras y "hasta llegaron a salir setas por la humedad".
Por su parte, el portavoz del equipo de gobierno del Ayuntamiento de Aranda, Emilio Berzosa, precisa que no ha habido retrasos al respecto y que "todo está en regla y en orden". La Junta de Castilla y León notificó al Consistorio que les había concedido una subvención, cofinanciada por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional, "entre abril y mayo". El anuncio de licitación se publicó el 9 de julio, con el día 29 como fecha fin de presentación de ofertas. El 2 de agosto se procedió a la apertura de las mismas y "ahora", prosigue Berzosa, se acaba de firmar el contrato, con un presupuesto de 559.000 euros. "Ya han empezado a medir y han hecho el pedido de los materiales", agrega al respecto, insistiendo en que una obra de "tanto calado, lógicamente, requiere su tiempo".
De hecho, el propio Berzosa explica que ayer mismo la Dirección de Educación, varios inspectores y el arquitecto estuvieron revisando las instalaciones donde van a tener que estar los alumnos de Infantil y Primaria del colegio Santa María durante los "dos o tres meses" que duren las obras.
A pesar de que los trabajos de mejora se ejecutarán en dos de los tres bloques del colegio, construidos en 1980 y 1984, se desalojará a todos los estudiantes, de los cuales una parte se quedarán en Las Francesas, a unos 14 minutos a pie, mientras que el resto tendrá que asumir algo más de media hora de caminata para asistir a clase.
SUSTITUCIÓN DE VENTANAS. Entre los trabajos previstos se incluye la mejora de la envolvente térmica y la sustitución de ventanas, así como la mejora de la eficiencia energética para "bajar la gran demanda de energía que requiere el edificio, la cual a día de hoy es ruinosa para su propietario", como recoge la memoria técnica.
Las actuaciones se centrarán en paliar la falta de aislamiento de los dos bloques, además de sustituir la carpintería "deficiente con una gran permeabilidad al aire".