El sábado murió atropellada una mujer de 74 años junto al Paseo de Fuentecillas y ayer la ciudad se despertó de nuevo con sonido de sirenas, ambulancias, policías y bomberos acudiendo a un nuevo siniestro. Esta vez fue al final de la calle Vitoria, a las puertas de la fábrica de Bridgestone, donde un brutal choque entre dos vehículos se saldó con seis personas heridas, tres de ellas graves.

La primera llamada de alerta la recibió a las 9,17 horas el Centro de Emergencias 112 de Castilla y León, alertando de la colisión de dos turismos, uno de los cuales a su vez había impactado contra un camión. La gravedad del golpe hizo que incluso en un primer momento se hablara de posibles fallecidos, y de hecho tres de los implicados, todos ellos ocupantes de uno de los coches, se encontraban atrapados dentro del habitáculo.

Hasta el lugar de los hechos se desplazaron la Policía Local, que tuvo que cortar la calle, una UVI móvil, tres ambulancias de soporte vital básico, personal sanitario del helicóptero de la base de Villafría en un vehículo de intervención rápida por tierra y personal sanitario de Urgencias de Atención Primaria.

El lugar del accidente estaba ya marcado por la desgracia. El 2 de julio de 2006, en ese mismo punto, perdió la vida el niño Julián Etayo, de solo 8 años, cuando viajaba con su madre, su hermana, un amigo y la madre de éste a la celebración del Día del Burgalés ausente en Fuentes Blancas.

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