El traslado de las barracas a ExpoBurgos deberá esperar, al menos, hasta 2026. Los plazos que marcan los procesos administrativos abiertos chocan frontalmente con la expectativa del equipo de Gobierno municipal, ya que aún no se han completado los avances urbanísticos necesarios para establecer una hoja de ruta milimétrica en el desarrollo de uno de los grandes proyectos del presente mandato.

El Ayuntamiento asume que no existe el menor margen de maniobra para que las barracas abandonen su ubicación actual en 2025, como era su intención inicial.La previsión más optimista contemplaba esta posibilidad en el que caso de que la explanada del futuro recinto ferial estuviera lista, un hito que a estas alturas ya no será posible de conseguir. Por ello, el nuevo horizonte temporal para que las atracciones de SanPedro lleguen a tiempo a su nueva ubicación se fija en el siguiente ejercicio si se cumplen las nuevas previsiones.

La modificación del PGOU tiene la llave para centrar de una vez por todas la atención tanto en el proyecto como en las futuras inversiones.Este trámite servirá para cambiar la clasificación de tres parcelas situadas en Villalonquéjar IV y unirlas en un gran solar de 201.780 metros cuadrados. Allí se construirá un edificio administrativo con una sala de conferencias con capacidad para, al menos, 500 asistentes.Además se habilitarán espacios de reuniones de dirección y se habilitará el terreno que servirá para acoger las barracas, conciertos y otros eventos.

Este último punto es el prioritario para que ExpoBurgos comience a 'funcionar' en un horizonte cercano en el tiempo. El impulso del nuevo recinto ferial de la ciudad se completará por fases y su desarrollo se prolongará al menos durante dos mandatos. De esta forma, la adaptación del espacio disponible será el punto de partida para que pueda trasladarse los antes posible la feria.

La cuestión, sin embargo, trasciende el puro deseo político. El debate que rodea la ubicación de las barracas se produce desde hace décadas y tras pasar por LaQuinta, La Milanera y el polígono docente suma ya tres sampedros en los alrededores de Villatoro. Una apuesta que tampoco encuentra el consenso mínimo entre profesionales y ciudadanos.

La alcaldesa, Cristina Ayala, ya destacó en su balance de las Fiestas de este año que la localización «heredada» de las barracas tampoco le convence.Sin embargo, la calle Laredo acogerá un año más la feria con la intención de que la explanada de ExpoBurgos esté preparada cuanto antes para acoger las atracciones.

Los feriantes ya advirtieron en este periódico la necesidad de cambiar lo antes posible de ubicación. Tanto es así que afirmaron que Burgos tiene actualmente el «peor recinto» de España. Los barraqueros se quejaron en su última visita de la «mala ubicación» del espacio, así como del desnivel de la calzada y de la mediana de la calle Laredo, condicionantes que les obliga a «elevar las atracciones más de lo debido».

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