El Plan Anual de Prevención, Vigilancia y Extinción de Incendios Forestales para el 2024, elaborado por la Junta de Castilla y León, concluye que las zonas de la provincia donde se localizan los mayores índices de «peligro alto» se concentran en el extremo norte y en aquellos situados en la meseta -Aranda de Duero y Burgos-. Concretamente, Merindad de Valdeporres se alza como el municipio que cuenta con una superficie más grande de elevadi riesgo atendiendo a los diferentes criterios que condicionan la propagación del fuego. Alcanza las 8.475 hectáreas, y le siguen en este listado Espinosa de los Monteros, con 8.278 hectáreas, y Aranda de Duero, con 3.120 hectáreas.
La provincia de León se alza como la provincia de la Comunidad que cuenta con una mayor superficie de áreas con índice de peligro alto, con 296.690 hectáreas, seguida de Zamora, con 86.043, y de Ávila, con otras 35.537. En el mismo apartado del Plan se mencionan como medidas a adoptar el diseñar y ejecutar actuaciones de selvicultura preventiva, priorizar las ayudas públicas a la asociación o agrupación de propietarios y productores forestales, la puesta en marcha de aprovechamientos de maderay biomasa que permitan reducir la carga de combustible, integrar la identificación de estas áreas en las plataformas informáticas de apoyo a la gestión de emergencias o estudiar los tipos de fuegos que se suelen producir en cada zona.
Más allá del mapa de peligro principal, a través del extenso documento redactado por la Junta se mencionan otras cuestiones que hacen que en una zonas u otras exista mayor riesgo. Así, en cuanto a los lugares con baja accesibilidad se menciona la Sierra de la Demanda y, en concreto, el municipio de Neila. Este punto se alza como el que tiene una mayor extensión y riesgo alto por las dificultades para acceder, mientras que disminuye a medio-bajo en otros puntos como Valle de Valdelaguna, Huerta de Arriba, Castrillo la Reina, Hacinas, Salas de los Infantes, Riocavado de la Sierra, Pineda de la Sierra, Rábanos, Villasur de Herreros y Barbadillo de Herreros.
Las zonas altas de las áreas de montaña del Puerto de Estacas de Trueba son otros territorios de cierta extensión donde existe un riesgo medio- bajo, como ocurre en Merindad de Valdeporres y Merindad de Sotoscueva. Y en ese mismo apartado se encuentran la Sierra de la Tesla y los Montes de Miranda.
A la vista de lo ocurrido en el año 2022, se menciona a Oña y Rucando como los dos municipios con mayor amenaza por rayo. Aquellos con mayor superficie y alta concentración de incendios por causa agrícola son Espinosa, Merindad de Valdeporres, Aranda, Valle de Valdebenaza, Merindad de Montija y Gumiel de Izán. Es decir, principalmente en la zona norte de la provincia y en Ribera.Y por incendios intencionados en monte arbolado también aparecen, por este orden, Merindad de Valdeporres, Espinosa, Valle de Valdebezana, Gumiel de Izán y Aranda.
Autobomba en Aranda. Una de las mayores novedades que se incluye es la incorporación de la unidad de brigada y autobomba (UBA) a Aranda de Duero en 2024. Estará operativa nueve meses y tendrá cinco personas. Ahora había en Mombeltrán (Ávila), Santa Colomba de Somoza (León), La Fuente de San Esteban (Salamanca) y Muelas del Pan (Zamora). En total tienen un coste anual de 7,6 millones de euros y su función principal es la extinción de incendios, aunque también realizan labores de selvicultura y prevención en montes.
También se menciona que habrá 14 cuadrillas terrestres, con 7 personas cada una, que se ubicarán en Espinosa, Valle de Valdebezana, Medina de Pomar, Oña, Miranda de Ebro, Basconcillos del Tozo, Belorado, Villasur de Herreros, Salas de los Infantes,, Quintanar de la Sierra, Huerta de Abajo (Valle de Valdelaguna), Huerta de Rey, Aranda de Duero y Matagrande (Burgos). Y se suma la cuadrilla nocturna de Pradoluengo. Se prevé mejorar el funcionamiento, las condiciones y el equipamiento.
En el Plan incluye los retenes de maquinaria de Trespaderne y Burgos, los medios aéreos y las cuadrillas helitransportadas de Pradoluengo y Medina de Pomar. Y no faltan los vehículos autobombas del operativo de incendios en Espinosa, Medina, Trespaderne, Valle de Tobalina, Oña, Merindad de Río Ubierna, Villafranca Montes de Oca, Burgos, Quintanar y Huerta de Rey. Y se completa con las autobombas conveniadas en Valle de Valdebezana, Oña, Condado de Treviño y Villadiego.