Aunque no sirve para solventar la ya manida reivindicación de más frecuencias o mejores horarios de tren entre Burgos y Madrid por alta velocidad, Renfe acaba de dar una pequeña alegría a los burgaleses. El operador ferroviario español ha terminado el proceso de implementación del Sistema Europeo de Gestión del Tráfico Ferroviario (más conocido por sus siglas ERTMS del inglés European Rail Traffic Management System) en un tren de la serie 121 (Intercity) que cubre el viaje a diario entre San Sebastián/Irún y Madrid -y al revés-.
Este proceso, que se ha estado gestando durante los últimos meses y que ya ha cumplido las preceptivas pruebas de homologación en la línea de alta velocidad Burgos-Madrid, permite ganar una media de 7 minutos por trayecto. De este modo, desde el pasado 30 de noviembre los pasajeros que tomen el Intercity de las 14:46 horas en Chamartín llegan a Rosa Manzano a las 16:26 horas.
De la hora y 47 minutos que tardaba este tren en unir ambas terminales tras la inauguración de la línea de alta velocidad en julio de 2022 se ha pasado a una reducción de 7 minutos (1 hora y 40 minutos). ¿El motivo? Al tener instalado el ERTMS, el convoy puede alcanzar los 250 kilómetros por hora de velocidad máxima durante su trayecto frente a los 200 km/h que tenía hasta ahora como límite. Por encima de este tope tan solo circulan los trenes AVE, que llegan a los 300 km/h.
El viaje de este tren desde Rosa Manzano hacia Madrid, a las 8:06 horas, también ve recortado su tiempo. Desde el 11 de diciembre el tiempo se reduce otros 7 minutos hasta una hora y 47 minutos, tal y como refleja la página web de Renfe. Se espera que el operador estatal continúe implementando el ERTMS en otros modelos que se emplean en el corredor País Vasco-Madrid para optimizar al cien por cien sus capacidades y ofrecer un mejor servicio a todos los pasajeros.
Lo que no se espera es que esta línea sea agraciada con uno de los nuevos modelos S-106 que Talgo entregará a Renfe en las próximas semanas. Tras varios años de retraso, el fabricante vasco dará cuenta por fin de las primeras unidades de estos modernos trenes que, si nada cambia, irán a parar principalmente a corredores como los de Galicia, Asturias, Levante o el Madrid-Barcelona.
Aunque Burgos no logre ninguno de ellos, sí que se podrá beneficiar de los trenes que salgan de circulación de estas líneas, y que reforzarían la oferta comercial del operador ferroviario estatal. Todo ello a la vez que la línea Venta de Baños-Burgos se ha convertido en uno de los principales bancos de prueba a la hora de homologar y ganar kilómetros de trayecto a las unidades S-106.
Conocidas como Avril, en mayo de 2021 Talgo comunicó a través de una nota de prensa que se habían alcanzado los 360 kilómetros por hora en el trazado castellano durante un examen de sus capacidades operativas. El ministro de Transportes Óscar Puente realizó la semana pasada un viaje de prueba hasta Vigo en uno de estos trenes.