El colegio concertado Santa María la Nueva y San José Artesano quiere que la dotación tenga una mayor visibilidad hacia la zona de expansión urbanística que da a la avenida de Castilla y León. Para ello, la gestión de la dotación educativa, dependiente ahora de la Fundación Manjón y Palencia, ha decidido derribar el extenso muro de dicho entorno y proceder a la colocación de un vallado, a modo de verja, similar al que puede verse en su entrada principal, la de la calle Juan de Ayolas, así como a la renovación del patio trasero que hace las funciones de aparcamiento tanto para el profesorado como para las familias del alumnado.
Las obras comenzaron nada más comenzar las vacaciones de Navidad y su conclusión se prevé para antes del 8 de enero, coincidiendo con el regreso a las aulas, con el fin de que estas interfieran lo menos posible en la actividad lectiva, según explica su director, César Martínez, quien precisa que se trata de una intervención que iba a ejecutarse este pasado verano pero que, finalmente, se ha retrasado debido al «volumen» de trabajo de la empresa que la lleva a cabo.
«Queremos abrir el colegio al barrio», sostiene el responsable educativo respecto al objetivo de un proyecto que no solo afecta al muro existente, de grandes dimensiones y caracterizado por sus murales pintados, sino también al patio trasero de la dotación, donde se habilitará una nueva entrada. En un principio, avanza que solo se adecentará el pavimento, que se encuentra en mal estado, si bien no se modificará su uso como zona de estacionamiento de vehículos para facilitar el acceso de los miembros de la comunidad educativa. No obstante, no se descarta en un futuro adecuar parte del terreno como espacio educativo singular y de esparcimiento con jardines y bancos destinados a la lectura.
La inversión de esta obra asciende a 60.000 euros, que suman a cuantías anteriores de mejora de las instalaciones que siempre suelen ejecutarse durante el verano. Sin ir más lejos, en los dos últimos años el centro ha realizado un desembolso de 200.000 euros en el adecentamiento de espacios académicos con motivo de la implantación del ciclo de grado medio de Soldadura, a lo que se suma otra cuantía similar para la renovación de toda la instalación eléctrica.
Con anterioridad, se han reformado aulas para la puesta en marcha del primer ciclo de Infantil, mientras que remontándose más en el tiempo, en 2017, se procedió al arreglo de parte de la cubierta, así como a la colocación de placas solares, mejoras en aulas y talleres y también en el patio interior, lo que conllevó otros 100.000 euros.
El colegio Santa María la Nueva y San José Artesano cuenta este curso con más de 1.500 alumnos, repartidos en las distintas etapas que imparte en sus dos edificios; EducaciónInfantil, Primaria, Secundaria, Bachillerato y Formación Profesional. Propiedad del Arzobispado, en septiembre de 2023 se hizo efectivo el cambio de dirección y titularidad de las instalaciones, que dejaron de pertenecer a la Institución Teresiana para integrarse en la Fundación Manjón y Palencia, de la que dependen los colegios de la Diócesis burgalesa.