Su construcción a base de troncos de árboles la zona y su espectacular mirador a 24 metros de altura son la seña de identidad de la Casa de la Madera, en el Comunero de Revenga. Un singular espacio que este mes de julio ha cumplido 15 años y que recibe una media de entre 10.000 y 12.000 visitantes cada año año. Durante esta década y media, bajo la gestión de Miguel González, ha acogida numerosas exposiciones temporales, actividades relacionadas con el medio ambiente y la naturaleza o charlas. Propuestas de las que ha podido disfrutar el público, además de la exposición permanente dedicada al conocimiento de la madera, tanto desde el punto de vista de su uso como material innovador y sostenible para la construcción, como del proceso de formación de la misma por parte de los árboles.
Creada como un espacio multidisciplinar, Miguel González trata de darle contenido y vida con interesantes planes para todo tipo de públicos. En cuanto a las exposiciones temporales, se ha podido ver una muestra retrospectiva formada por algunas de las piezas que se han exhibido en este espacio durante los últimos 15 años. También es posible observar fotografías de naturaleza tomadas por Antonio Doñate Vicente de Vera. Igualmente, durante este mes de agosto se podrá apreciar el increíble trabajo de marquetería de Gregorio Cámara, de Huerta de Rey. Entre sus propuestas, cuadros elaborados a base de pequeñas piezas de madera.
Para los más pequeños, entre 6 y 12 años, Miguel prepara unos talleres de manualidades relacionados con el reciclaje todos los viernes por la tarde de 16.30 a 18 horas. Para asistir a los mismos es necesario inscribirse de manera previa en el teléfono 947 44 78 01.
Rastreo de huellas. Para mayores de 14 años y adultos está pensado un curso de rastros y huellas de fauna salvaje programado para los días 19 y 20 de agosto con un precio de 50 euros. Esta Casa de la Madera ofrece también la posibilidad de completar un juego de scape room para el que también hay que reservar antes. Por último, con fecha aún por confirmar, Miguel González está planificando la celebración de una o dos jornadas de voluntariado ambiental con el fin de recoger residuos por todo el entorno y ayudar a mantenerlo limpio.
Durante agosto, abre de miércoles a domingo de 11 a 20 horas y los martes de 11 a 19 horas. Los lunes permanecerá cerrada.