El grupo burgalés Orégano entrega a la Fundación Joaquín Díaz todo su material grabado en los pueblos de Burgos durante los años setenta, cuando recogían canciones que les eran interpretadas por las personas mayores de cada lugar. En total, son más de seis horas en cinta magnetofónica reunidas en13 casetes. Gran parte de esas coplas populares recogidas por Orégano figuran en sus discos 'Homenaje a Antonio José', 'Orégano en el Principal' y 'Siempre por Burgos', pero las cintas donadas a Joaquín Díaz contienen las grabaciones originales obtenidas en cada plaza, en cada cantina, con las voces de quienes se las regalaron.
Según informan en un comunicado, aprovecharon una visita al Museo de Instrumentos, creado por el etnógrafo zamorano Joaquín Díaz, para hacer entrega de este material. En su casa, ubicada en Urueña (Valladolid), sede de la fundación y del museo, compartieron una comida junto con varios integrantes del grupo El Nido, formado a su vez por músicos de Burgos y Valladolid.
En estas cintas se puede escuchar cómo burgaleses de distintas zonas de la provincia cantaban a los miembros de Orégano. El grupo destaca así la presencia de Paula Moreno, de San Pedro de Arlanza; Teodorín, de Mambrillas de Lara; Modesta Ibáñez, de Cuevas de San Clemente; Crescenciano Hernando Puente, de Jaramillo Quemado; Leonor Moneo y Joaquina Álvaro Mateos, de Covarrubias; Pepa Saiz García y Gregorio Palomero Alameda, Farruco, de Santo Domingo de Silos; Luisa la Malagueña, de Poza de la Sal… entre otros informantes.
Orégano comparte un tesoro - Foto: ICALTal y como recuerdan, Orégano llevó a los escenarios y a sus discos muchas de esas canciones, como 'Está lluviendo', 'El pirulí de las mozas', 'Oh qué mañana de Pascua', 'Qué haces ahí, mozo viejo', 'Ojitos como los tuyos', 'Coloradita' o 'Canto de bodas'. Este grupo se formó en 1976, y ofreció su último recital en Burgos el 30 de diciembre de 2016, con motivo de su cuarenta aniversario, y en esa fecha dejó los escenarios.
Desde entonces solo ha hecho colaboraciones esporádicas junto con el grupo El Nido, pero continúa cantando villancicos, espontáneamente, todos los días de Nochebuena por las Llanas; y canciones populares en algún sábado de las fiestas de San Pedro, antes bajo el arco de San Juan y ahora bajo el arco de Santa María (este año, el próximo día 29 de junio al caer la tarde). Sus discos se pueden adquirir en las tiendas La Zona Galáctica y Música y Deportes, de Burgos. En Youtube figura completa su última actuación, entre otras; así como canciones sueltas.
Joaquín Díaz. Considerado el más importante etnógrafo español, Joaquín Díaz cantaba en público y recogía testimonios populares por toda España entre 1965 y 1976, y era una persona muy conocida por sus frecuentes actuaciones en televisión y radio, y por sus discos de música tradicional. Después se dedicó de lleno a la investigación, sin abandonar las grabaciones discográficas. Ha publicado más de 80 discos y 70 libros.
Joaquín Díaz ha recibido doctorados honoris causa por la Universidad de Valladolid y por el Saint Olaf College de Estados Unidos; es ciudadano de honor del Estado de Texas, miembro de honor del International Council for Traditional Music y de numerosos institutos y sociedades españoles y extranjeros de etnografía.
El 23 de abril de 1999 fue galardonado con el Premio Castilla y León de Humanidades y Ciencias Sociales, máximo honor en su género en la Comunidad. Se le otorgó también el Premio Norte de Castilla de Cultura en el año 2000. Es académico correspondiente de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando y pertenece a la Academia de las Artes y las Ciencias de la Música.
La Fundación Joaquín Díaz, amparada por la Diputación de Valladolid y la Junta de Castilla y León, tiene su sede y su museo de más de 2.000 instrumentos en Urueña (Valladolid) desde 1991. En ella trabajan ocho personas cualificadas, y custodia un material invaluable, de grandísimo interés para los investigadores de tradiciones y costumbres: 50.000 libros (entre ellos, cientos de cancioneros y unas 300 recopilaciones de refranes); 4.000 aleluyas con estampas, 9.000 pliegos de cordel (cuentos populares y canciones que se exponían al público colgados de una cuerda), 8.000 discos de vinilo, 14.000 fotos antiguas, 120.000 grabaciones en MP3 donde se oye a los informantes originales que le transmitieron a Díaz durante estos años canciones o cuentos. A ellos se añadirán ahora los lugareños burgaleses que transmitieron a Orégano una "cultura ancestral".