"Quizás fue el ángel de Lerma". Así se ha referido Juan Álvarez Quevedo, comisario de la exposición Angeli, a Francisco Gómez de Sandoval y Rojas, para enlazar la figura histórica más importante de la Villa Ducal con el acontecimiento que la convertirá en centro de arte y referente patrimonial durante los 6 próximos meses. También Gonzalo Jiménez, secretario general de la Fundación Las Edades del Hombre, ha insistido en la importancia que se le concede al "bellísimo" emplazamiento elegido para esta 24 edición y a todo el entorno del Arlanza, que se va a potenciar con actividades paralelas.
El Duque de Lerma propició en 1617 la traslación del Santísimo Sacramento desde el convento de la Ascensión hasta la Colegiata de San Pedro, que alberga unas 70 de las 90 piezas que conforman la exposición Angeli. 402 años después de aquel gran evento religioso y social desembarca Las Edades del Hombre, en la que muchos vecinos de la comarca tienen depositadas grandes esperanzas.
Entre el párroco de San Pedro y el comisario de la muestra, Juan Álvarez Quevedo, se han ocupado y preocupado de contar el número de ángeles presentes en la muestra. En las piezas aparecen 307, a una media de 3,4 por obra, mientras que en la iglesia has otras 184 representaciones. En total, 491.
Se puede sumar uno más, virtual, al que da vida una niña con rostro angelical -valga la redundancia- en el vídeo introductorio de 3 minutos que recibirá al visitante en la Ermita de la Piedad. Este ángel de la guarda aparece y desparece en medio de una lluvia de plumas para acompañar a una mujer embarazada, a una niña víctima de acoso y a un mayor solitario que recuerda como "antes, a los niños nos enseñaban a orar... también a los ángeles" y ahora estos seres están aquí, muy cerca. En Lerma.