El viernes se estrena en España Gladiator 2, de Ridley Scott. Y ese mismo día Abraham Cupeiro, que participa en su banda sonora, estará actuando por primera vez en Burgos. El propio Scott, cuenta Cupeiro, fue quien se interesó por que sonaran en su película instrumentos que él recupera y fabrica dándoles nuevas sonoridades, como el karnyx (una especie de trompeta celta de la Edad del Hierro que en su extremo dibuja una cabeza de animal), el cornu (de viento también y con forma de G) o el aulós griego (como una flauta doble).
Igualmente ha colaborado con Steven Spielberg en la serie documental Life on our planet (La vida en nuestro planeta) y hace veinte días tuvo lugar su colaboración más reciente con el mundo del cine en la película Marie, que protagoniza Anthony Hopkins y se estrena en diciembre: «Yo lo veo como el triunfo de lo humilde. Porque lo que hago es recuperar instrumentos que se han perdido, que no son míos aunque los fabrique y pertenecen a la historia de la humanidad. Digamos que a veces vamos a un ritmo tan vertiginoso que nos olvidamos de las cosas más sencillas, por así decirlo. Y ver que esto tiene cabida en grandes producciones como Gladiator me llena de orgullo, pero sobre todo porque llevamos lo humilde a algo tan espectacular como puede ser esa película», resume.
Mientras espera poder crear una banda sonora de su puño y letra, lo que hace es interpretar «y sobre todo improvisar» sobre las imágenes: «Muchas veces los compositores no saben escribir para estos instrumentos porque aunque son antiguos son realmente nuevos en el panorama musical. Así que a veces hago esa labor, entre comillas, de composición creativa».
Cuando no está grabando para grandes producciones está fabricando instrumentos o dando alguno de los 120 conciertos que tiene al año por todo el mundo. Uno de ellos es el que el viernes dará abriendo el décimo Festival Babieca Folk, que se celebra hasta el 23 de noviembre. Cupeiro ofrecerá dos conciertos didácticos por la mañana para escolares y un espectáculo musical por la tarde, a las 20:15 horas, todos en Cultural Cordón. «Los matinales son muy importantes porque los niños y niñas no tienen filtros, les hago muchas preguntas y me gusta conversar con ellos mientras voy haciendo este viaje por la historia de los sonidos de la humanidad. En el concierto de la tarde hay humor, momentos evocadores, ambientes nostálgicos..., una montaña rusa de emociones con la máquina del tiempo de los instrumentos y la música».
Con 35 instrumentos sobre el escenario, el que más llama la atención es el karnyx tanto por su forma como por su sonoridad: «Es un instrumento simple en su construcción que ofrece una enorme libertad para buscar colores y timbres. Yo creo que suena a veces como un animal herido que pronuncia su último lamento antes de morir», describe reconociendo la belleza de ese «quejido belicoso».
Junto a Cupeiro estarán en el Babieca Folk nombres de la música como Mayalde y Lúnasa, Mario Andreu & Azofra y los irlandeses Shoreline Trío, entre otros.