Contenedores que durante cinco días no se recogen, basura que permanece en el suelo varias jornadas, depósitos que ni tan siquiera tienen una guía sobre la que colocarlos, incumplimientos en las rutas de los camiones, reducciones de la jornada en la que el personal debería estar a pie de calle, zonas a las que el baldeo de aceras no llega... Estas son algunas de las deficiencias que la empresa de control de calidad contratada por el Ayuntamiento de Miranda ha detectado en el servicio que realizó la adjudicataria, PreZero, en octubre. Pese a que hasta ahora se habían intentado solventar los incumplimientos del contrato sin medidas demasiado drásticas, la dejadez continuada de la compañía ha provocado que el área de Medioambiente, liderada por María Cueva, se haya quedado sin más opción que hacer propuestas de sanción.
La edil de IU-Podemos explica que «la empresa de control de calidad ha notado que ligeramente ha podido mejorar el servicio, pero claramente hay otros apartados en los que sigue habiendo deficiencias y son las que se proponen para sanción por ahora, porque estas son las más irrefutables, pero puede haber otros incumplimientos que se confirmen más adelante». En concreto, se van a tramitar multas por las carencias en la limpieza de aceras con agua a través del método del baldeo y por la pésima gestión inicial de la campaña para eliminar hojas en otoño, ya que arrancó «sin que hubiera ni un camión». Otros incumplimientos, como los contenedores sin vaciar, podrán derivar en sanciones, pero deberán pasar «tres meses» hasta comprobar si se mantiene el problema.
En cualquier caso, ya hay otras carencias que, si bien por el momento no generarán multas, se han constatado y perduran en el tiempo. Por ejemplo, la empresa de control de calidad volvió a ver en octubre que, como ocurría en septiembre, PreZero engordaba sus partes de trabajo. Cueva relata que el informe de la compañía encargada de esta fiscalización muestra cómo la adjudicataria «decía que un camión había estado el mismo día y a la misma hora haciendo diferentes actuaciones» o cuestiones como que en esos informes sobre su labor «ponía que habían cumplido con servicios que no se habían hecho».
La concejala comparte las conclusiones que le ha trasladado la firma que controla a PreZero, pues opina que «hasta ahora se ha intentado que cambiara la tendencia, pero está siendo insuficiente y llegarán las sanciones económicas porque sigue existiendo, pese a las advertencias de multas, una clara deficiencia en materia de limpieza, es algo que está a la vista de todos y tiene que corregirse por todos los medios, bien sea porque hay un problema en la organización del servicio o porque falte personal».
En este sentido, la representante de IU-Podemos describe que la «empresa de control de calidad está haciendo un buen trabajo, porque hace un seguimiento exhaustivo y muy riguroso a la hora de revisar la problemática, pero además está proponiendo las soluciones para que la cosa cambie». Ahora tan solo falta que la adjudicataria aplique esas posibles medidas, ya que hasta el momento «no está siendo bastante» y todo queda en «intenciones».