La compleja instrucción judicial sobre el incendio que hace casi un año asoló la comarca del Arlanza, y que tramita el Juzgado de Lerma, sigue avanzando en el esclarecimiento de las causas y circunstancias que rodearon el mismo para determinar las responsabilidades penales. En este proceso judicial, una de las últimas actuaciones ha sido notificar al conductor del tractor, que en el momento de declararse el incendio estaba en la finca donde se originó, supuestamente en la cosechadora, que de testigo ha pasado a la situación de investigado, figura procesal que antes se denominaba imputado.
Hasta ahora, en la causa únicamente estaba como investigado el conductor de la cosechadora, pero tras recibir una serie de informes y las declaraciones efectuadas en la sede judicial por dos testigos, uno de ellos el conductor del tractor que cargaba grano en el momento de originarse el siniestro, la jueza instructora ha decidido investigar a esta segunda persona, que ahora tendrá que volver a la sede judicial asistido por un letrado para ratificarse o no en las declaraciones que realizó el año pasado como testigo.
En esas primeras declaraciones del investigado y de los dos testigos, el abogado del municipio de Santibáñez del Val, Sergio Carpio, de SBK ETL Global, ya manifestó que existían «contradicciones severas» y por esos solicitó un careo entre ellos para intentar esclarecer algunas de esas discrepancias, careo que no se ha celebrado y que ahora volverá a pedir, pero ya con el tractorista como investigado.
Informes concluyentes. En los últimos meses también han llegado al juzgado algunos de los informes solicitados por el instructor a la Guardia Civil,Junta de Castilla y León y a la marca de la cosechadora implicada en el siniestro (New Holland) para reconstruir los hechos. A raíz de estos informes el juzgado ha llamado al conductor del tractor como imputado. Los tres informes, afirma el letrado de Santibáñez, «coinciden en todo», desde la hora de comienzo del fuego, entorno a la una del mediodía, «es decir fuera del horario permitido para la cosecha», puntualiza, y al lugar y punto de ocurrencia del suceso «afirmando, en contra de las tesis de la defensa, que solo hay un foco o punto de ignición, que se produce por la cosechadora en el momento que hace la descarga de grano en el tractor».
En el informe de la marca de la cosechadora, además de recoger todos los puntos de fricción en los que podrían haber originado, concluye que la primera ignición se podría haber originado en el sistema del aire acondicionado, justo en el momento que se estaba realizando la descarga de grano al tractor.
Por lo que respecta al grado de responsabilidad de los dos investigado, Carpio manifiesta que «los dos tienen la misma responsabilidad, los dos son responsables directos penalmente hablando».
Sin valoración de daños. Lo que es una valoración total de daños todavía no existe, lo que sí que hay desde hace varios meses es una primera valoración estimativa, realizada por la Junta, sobre daños mediomabientales, «que valora en unos cinco millones solo el daño natural, que no tiene nada que ver con otros daños o con los que se han formulado denuncias», matiza Carpio, quien recuerda que el número de denunciantes y de personificaciones ya ha parado.
Según unas primeras estimaciones, el fuego que afectó a Quintanilla del Coco,Santibáñez del Val y Santo Domingo de Silos dejó unos 7.000 afectados, de los que unos 1.000 han presentado reclamación y denuncia en el Juzgado de Lerma. A la espera de conocer las valoraciones definitivas de daños, se estima que podrían superar los 25 millones de euros, a los que habrá que sumar los más de 5 en los que estima la Junta los daños medioambientales. Para hacer frente a esos pagos e indemnizaciones se han personado en la causa judicial 8 compañías aseguradoras.
El letrado del municipio de Santibáñez, tras la decisión de la jueza de investigar al conductor del tracto, confía en que el caso llegará a vista oral, «porque lejos de las contradicciones entre investigados y testigos, hay indicios que apuntan a que no podían estar cosechando, hay llamadas a los servicios de emergencias y testigos oculares que dicen que a la hora en la que ven arder es en la que no se podía cosechar, es decir estaba en un horario irregular cosechando, motivo más que suficiente para ir a juicio», asegura Carpio, quien matiza que las peticiones de penas serán importantes por el tamaño del daño y el delito.