El Burgos CF hizo los deberes el sábado y logró su primera victoria de la temporada después de hacer un buen partido en líneas generales, en el que solo faltó acierto en el remate para que el duelo contra el Real Oviedo se hubiera convertido en una fiesta. Aunque los tres puntos salieron caros a los blanquinegros, ya que perdieron a una de sus piezas en la batalla, Unai Elgezabal. Otra de ellas, Miguel Ángel Atienza, se retiró con molestias. A lo anterior hay que añadir que Edu Espiau se cayó de la convocatoria a última hora debido a un problema muscular, aunque la presencia de Lucas Ricoy en la lista hacía presagiar que la lesión del delantero canario ya se conocía el viernes, como así ha confirmado hoy el club.
Tanto Elgezabal como Espiau sufren sendas roturas musculares. El central de Urduliz, en el gemelo interno de su pierna derecha; y el delantero de Las Palmas, en el sóleo de su pierna izquierda, según informa el Burgos CF tras las pertinentes pruebas médicas a las que se han sometido ambos futbolistas. Los dos ya están recibiendo tratamiento específico por parte de los servicios médicos del club y quedan pendiente de evolución para su reincorporación al equipo.
En su comparecencia ante los medios de comunicación tras la victoria ante el Real Oviedo, Jon Pérez Bolo dio por hecho que a Elgezabal lo perderían «varias semanas». A los diez minutos de partido tuvo que ser sustituido por un problema en el gemelo y es imposible que pueda jugar en Gijón. Su progreso determinará el tiempo que deberá permanecer alejado de los terrenos de juego.
La lesión de Espiau, que sufrió molestias en su pierna izquierda durante el último entrenamiento antes del choque ante los carbayones y no entró en la convocatoria, no parecía tan grave. Conocida la rotura muscular en el sóleo, habrá que esperar y ver la evolución de su dolencia en las próximas semanas para ver las posibilidades de que el delantero vuelva a estar a disposición de Bolo.
El cuerpo técnico pierde así a dos de los jugadores que habían sido titulares en el inicio de la campaña. Lo que se comprobó el sábado es que el equipo se supo adaptar a las circunstancias pese a que ninguno de los dos pudo aportar su granito de arena -Elgezabal estuvo en el campo diez minutos- (...).
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