El portero sevillano del Paris Saint-Germain, Sergio Rico, ha salido este viernes del hospital Virgen del Rocío de Sevilla, tras permanecer ingresado por un accidente con un caballo en la romería de El Rocío (Huelva) el pasado 28 de mayo, y ha confiado en su recuperación como deportista para "estar disponible dentro de poco, recuperarme y volver al fútbol".
Acompañado por su esposa, Alba Silva, y recibido con aplausos por la gente que estaba en el centro hospitalario, Sergio Rico ha salido a las 13:10 del hospital, por su propio pie y visiblemente más delgado y sonriente, y ha mostrado su agradecimiento a todos los que "han perdido un minuto para mandarme un mensaje".
En total, el guardameta sevillano ha estado ingresado 83 días, de los que 37 estuvo bajo vigilancia las 24 horas del día en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del centro hospitalario de la capital andaluza, hasta que el 4 de julio pasó a planta con atención médica y cuidados de enfermería.
El portero, de 29 años y formado en la cantera del Sevilla, en cuyo primer equipo estuvo desde la temporada 2014-15 a la 2018-19, estaba el sábado 27 de mayo convocado por el equipo francés para el penúltimo partido de la liga gala, que jugaba en Estrasburgo, donde el PSG empató a uno y se proclamó campeón del torneo.
El meta, tras ese partido, se trasladó a la aldea de El Rocío, donde tuvo el accidente a las 8:30 de la mañana, y fue evacuado al hospital sevillano tras ser estabilizado por los servicios de emergencia que se encargaban de la cobertura sanitaria de la romería almonteña.
Durante su hospitalización, ha sufrido varios altibajos en su estado de salud y hasta en dos ocasiones se le suprimió la sedación, hasta que el 7 de junio se le retiró completamente y desde entonces ha estado consciente y tratado por el equipo de intensivistas de las graves heridas que le ocasionaron en la cabeza las patadas del caballo.
Está previsto que Sergio Rico siga su recuperación ya en casa tras casi tres meses ingresado después del fatal accidente.