Renfe demolerá tres de las naves de su taller de motor

J.V.
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El proyecto afecta a los recintos diesel, de carpintería y almacén. La duración de la ejecución abarca 4 meses y pretende una adecuación del terreno

Fachada exterior de la nave de carpintería. - Foto: DB

El descenso de la carga de trabajo y el envejecimiento de las instalaciones ha provocado que Renfe inicie el proceso de demolición de las naves diésel, carpintería y almacén exterior situadas en el taller motor. La compañía anunció la licitación del proyecto el pasado 11 de enero y mañana acaba el plazo de ofertas. La duración del mismo abarcaría cuatro meses desde la adjudicación del contrato y la aprobación del proyecto planeado. El presupuesto base del contrato asciende a 193.306 euros. 

Renfe se ha marcado como objetivo el poder trasladar la actual base de mantenimiento de remolcado, que se encuentra a unos pocos kilómetros de la de motor, a las futuras nuevas instalaciones. Previamente a las obras de demolición, se deberá redactar un proyecto del mismo, cuyo duración será de un mes. Posteriormente,  la compañía  dispondrá de una semana para la aprobación del mismo y finalmente se comenzará la ejecución de la demolición que se prolongará tres meses como máximo. 

La nave diesel se trata de la que mayor superficie tiene de todas las incluidas dentro del proyecto con un total de 975 metros cuadrados. Para poder llevar a cabo su demolición, Renfe indica que se han de desmontar alguna de sus instalaciones como la de alumbrado y cableado, además de la calefacción. Sus oficinas quedarán destruidas así como las plataformas de acceso al techo de los trenes o las toperas, elementos de hormigón utilizados para detener completamente un tren.

Respecto a la nave de carpintería, se sitúa entre la diesel y la de almacén. A día de hoy, se encuentra llena de objetos que tendrían que ser clasificados para depositar en los vertederos correspondientes. También contiene una instalación para el llenado de baterías, que tendría que ser trasladada a otras de las naves del taller. Los operarios correspondientes deberán desconectar la electricidad de la nave así como la retirada del cableado. 

Con una superficie de 180 metros cuadrados, la nave almacén constituye la más pequeña de las tres. Para poder derruirla de manera adecuada, será preciso desmontar tanto el alumbrado de la misma como los postes contiguos. 

ARCHIVADO EN: Renfe, Miranda de Ebro