Los cuatro niños que residen en Santa Cecilia y acuden, dándose un buen madrugón, al colegio Pons Sorolla de Lerma se ven obligados este curso a soportar una ruta escolar que les obliga a estar más de 40 minutos en carretera hasta llegar a su destino. 40 minutos cuando son apenas 5,6 kilómetros los que separan el pueblo de la villa ducal, que se hacen en poco más de 6 minutos.
El diseño de la nueva ruta les roba a los niños, dos de 5 años y otros dos de 7, una hora de sueño todos los días, pero con ser ese un detalle importante a esas edades -tiene que levantarse a las 07,45 más o menos, porque el autobús les recoge a las 08,15-, lo que más critican desde el Ayuntamiento de la localidad es la «incongruencia del recorrido» y la negativa a aceptar las sugerencias que se han propuesto tanto a la Dirección Provincial de Educación como al propio delegado territorial de la Junta para hacer un recorrido más racional», explica el alcalde, Santiago Elena, padre, además, de dos de los niños y que hace tres años decidió trasladarse a vivir a Santa Cecilia en busca de una mejor calidad de vida para la familia.
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