Aún quedan muchos días de verano y, especialmente, una operación retorno en la que se esperan miles de desplazamientos. Si nada se tuerce en estas dos semanas, el verano habrá sido más o menos bueno en las carreteras burgalesas. Los siniestros han subido, pero la lesividad es menor. Tanto, que a día de hoy hay ocho fallecidos por accidente de tráfico cuando hace un año había 12. Aun así, la DGT sigue extremando la vigilancia y esta semana hará especial hincapié en el consumo de alcohol y drogas al volante. 

El jefe provincial de Tráfico, Raúl Galán, ha presentado esta mañana la campaña especial junto al subdelegado del Gobierno, Pedro de la Fuente, y el capitán de la agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, Juan Antonio Jiménez. Unos dispositivos, ha reconocido, "recurrentes" especialmente en verano. Los datos justifican el mayor control en las carreteras, pues el alcohol o las drogas están detrás de aproximadamente el 29% de los siniestros mortales en España. 

En el caso de Burgos, que este año contabiliza ocho fallecidos hasta el día de hoy, dos de ellos habían consumido alcohol, drogas o ambas sustancias. "El dato más escalofriante sale de los informes del Instituto de Medicina Legal, que muestra que el 52% de los muertos en accidente tenían niveles de consumo incompatibles con la conducción. Algunos incluso en márgenes de delito", ha expuesto Galán. 

En la provincia de Burgos, durante la campaña de vigilancia y control del consumo de alcohol y drogas que se desarrolló entre el 14 y el 20 de agosto de 2023, se realizaron 2.731 pruebas de alcoholemia con el resultado de 14 positivos, lo que representan el 0,57% del total. En el apartado de drogas, se realizó el test a 29 conductores con un saldo de 4 positivos, lo que equivale al 13,79%.

Pese a todo, el jefe provincial de Tráfico, que ha reconocido que este año está siendo moderadamente tranquilo, ha matizado que la campaña especial tampoco quiere generar una alarma social, pues el nivel de cumplimiento de los conductores está por encima del 90%. 

Agosto suele ser un mes complicado en cuanto a este tipo de comportamientos al volante, los cuáles el subdelegado del Gobierno ha calificado de "egoístas". Por este motivo, desde la DGT se ha insistido en mensajes de concienciación de cara a evitar que las cifras que a día de hoy son moderadamente aceptables no se conviertan en trágicas.