«Es necesario pasar ya de las musas al teatro». Con este símil se refirió ayer la alcaldesa de Burgos, Cristina Ayala, a la imperiosa necesidad de que el Gobierno se ponga manos a la obra y rehabilite la línea de ferrocarril que conecta Madrid-Aranda-Burgos.

Este trazado, en un estado tremendamente precario entre la capital castellana y la de la Ribera y clausurado desde esta hasta el epicentro de España, será una de las principales reivindicaciones que Ayala le transmitirá al ministro de Transportes cuando les concreten la reunión solicitada.

La regidora burgalesa recibió ayer la visita de la Plataforma por el Tren Directo, con la que, confesó, «coincidimos en nuestros objetivos». Destacó la alcaldesa que la reapertura de la línea «contribuirá a mejorar toda la provincia» y permitirá que Burgos, como ciudad media, «tire de todo el país».

Lamentó que desde el Gobierno «se estén entreteniendo en estudios de todo tipo» y urgió a Óscar Puente, titular de las infraestructuras estatales, a que inicie de una vez las obras de rehabilitación. En estos momentos se redacta un nuevo estudio de viabilidad de toda la línea que debería servir de base para tomar la decisión de su reapertura.

Intercambio de documentos. Por parte de la Plataforma por el Tren Directo, los representantes le hicieron entrega a Ayala de un extenso dosier en el que se repasan las principales actuaciones, proyectos o estudios a las que se ha sometido esta línea desde su clausura hace más de diez años.

El mismo ha servido como base para la aprobación de dos mociones en la Diputación de Segovia y la de Burgos. Del mismo modo, le anunciaron que ahora tienen la intención de que se presente en la Asamblea de Madrid.