El conocimiento del emplazamiento de los primeros pozos de sondeo por parte de BNK Hidrocarburos Sedano en las Merindades ha tenido rápida respuesta. Esta misma mañana tanto el PSOE como Podemos han emitido comunicados rotundos en contra de esta práctica y en el caso de los socialistas han solicitado un ‘no’ definitivo e inamovible” al fracking.
El senador socialista Ander Gil ha solicitado al Partido Popular que en todas las instituciones “mantenga y demuestre un ‘no’ definitivo e inamovible” a esta técnica de extracción de hidrocarvuros no convencionales. Una petición que considera “de urgente cumplimiento” después de que hoy el Boletín Oficial del Estado (BOE) publique la ubicación exacta de los pozos proyectados por la empresa BNK, por lo que se ha podido conocer que, por ejemplo, uno de ellos -en Merindad de Cuesta Urria- se encuentra a solo 22 kilómetros de la central de Santa María de Garoña.
Una proximidad que, a juicio del socialista, podría explicar que esta compañía no quisiera en la presentación de estos proyectos -el pasado 18 de febrero- especificar ese dato a pesar de que sus responsables fueron preguntados sobre la distancia entre los pozos y la planta nuclear. El senador recuerda que el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) sigue sin pronunciarse sobre cómo afectan los seísmos provocados por la utilización de este procedimiento en el área de influencia de una central nuclear. Además, puntualiza, no se trata de un mero informe, sino de una instrucción técnica complementaria que el propio presidente de este organismo se comprometió en 2013 a elaborar en sede parlamentaria.
Además, Gil, el procurador David Jurado y el concejal socialista en el Ayuntamiento de Villarcayo, Luis González, le piden “muy en especial” esa “postura única” a la alcaldesa de Villarcayo y procuradora en las Cortes autonómicas, Mercedes Alzola, a quien consideran “líder indiscutible en número de contradicciones” en este asunto.
Podemos.
En cuanto a la formación fundada por Pablo Iglesias, asegura en otra nota de prensa que desea manifestar su "más absoluto rechazo a los sondeos hidráulicos que BNK tiene pensado realizar en la provincia de Burgos. La aprobación de este proyecto no hace más que mostrar una vez más la ausencia de funciones por parte de la administración, no defendiendo a la ciudadanía".
Podemos Castilla y León añade que ya el Parlamento Europeo aprobó exigir declaraciones de impacto medioambiental para desarrollar cualquier proyecto en el que se realizara la técnica del fracking, poer "la realidad es que estas perforaciones podrán afectar gravemente a los acuíferos de las Merindades provocando su contaminación con el problema de salud pública que ello supone", Concluyen los podemitas que esta "técnica es incompatible con el desarrollo económico de la comarca, pues de llevarse a cabo provocaría efectos perniciosos para una ganadería y una agricultura sostenibles y para un turismo que valore la riqueza cultural y paisajística de la zona".