La Delegación Territorial de la Junta en Burgos busca a través de la empresa pública Tragsa un veterinario que se haga cargo de los cuidados que precisan los perros rescatados de un criadero privado de Melgar de Fernamental y tutelados por la administración regional en un centro canino de la provincia de Valladolid.
El contrato saldrá a licitación por 42.325,8 euros como importe máximo, ya que no se pueden determinar con exactitud todos los servicios que precisarán los animales. Se trata de uno de los pocos expedientes cuya tramitación no se ha paralizado con motivo de la crisis del Covid-19. En el expediente se remarca la necesidad de «asegurar el cuidado y el bienestar animal, como marca la legislación vigente» y se establece en el auto del Juzgado de lo Contencioso-Administrativo nº1 de Burgos, que fue el que autorizó al Servicio Territorial de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural de la Junta en Burgos la medida preventiva de retirada cautelar de los animales.
La primera intervención se realizó el 23 de enero, aunque desafortunadamente solo se pudieron retirar entonces aquellos canes que presentaban un estado de salud más precario. Posteriormente, la comitiva regresó y muchos animales habían desaparecido de las instalaciones. En una tercera visita a Melgar de Fernamental, a finales de febrero, fueron localizados otros 77 animales que habían sido repartidos por otra finca y por un piso del criador. En estas dos últimas intervenciones se hallaron también cerca de una veintena de cadáveres, algunos de los cuáles fueron devorados por sus propios ‘compañeros’, ante la falta de comida.
Visitas y urgencias. El contrato para los cuidados veterinarios se prolongará hasta final de año. Incluye las visitas regulares, «con una frecuencia de 2 días alternos a la semana», a las instalaciones que prestan el servicio de custodia y estancia, para comprobar el estado de todos los perros allí albergados, además de las urgencias que sean requeridas. Los animales deberán recibir la vacuna contra la rabia (a no ser que se tenga certeza de que el animal ya disponga de ella) y serán desparasitados. El adjudicatario también será el encargado de realizar el informe en caso de defunción o la necropsia, si hiciera falta.
El pliego de condiciones también establece cómo actuar en otros supuestos, por ejemplo esterilización de las hembras, eutanasia y ejemplares agresivos.