El MEH expone hasta marzo de 2025 la importancia de la mano en la evolución humana a través de una exposición que incluye fósiles originales de los yacimientos de Atapuerca no expuestos hasta el momento. La muestra, denominada Las manos mágicas, exhibe una falange del yacimiento de la Sima del Elefante de 1,2 millones de años, huesos asignados a Homo antecessor y dos brazos y dos manos prácticamente completos procedentes de la Sima de los Huesos.

Se trata de la segunda cita realizada por el centro artístico dentro del ciclo El cuerpo humano, que comenzó con la exposición Tenerse en pie. La postura erguida de la evolución humana. Las dos están relacionadas, ya que «al alcanzar la bipedestación nuestras manos se pudieron liberar para poder comenzar a aportarnos un nuevo horizonte de funcionalidad», según explicaron desde el MEH. 

El consejero de Cultura, Gonzalo Santonja, tildó de «apasionante» la muestra inaugurada ayer al demostrar la «solvencia científica y social» del Museo. Su director científico, Juan Luis Arsuaga, destacó por su parte la «elegancia y estética» de la misma, que permite tanto aprender como «disfrutar», animando a visitarla al público para «conocer más acerca del papel de la mano en la evolución humana». 
Arsuaga y Santonja pusieron en valor su importancia, dado que incorpora restos fósiles de los yacimientos de Atapuerca y que nunca antes se habían expuesto. En este sentido, recordaron que los elementos óseos de las manos no abundan en el registro fósil mundial, debido a que los huesos de la muñeca son pequeños y frágiles los de la palma y dedos, por lo que no existen apenas restos hasta que empiezan a practicarse los enterramientos entre los neandertales y los humanos modernos. 

No obstante, indicaron que existen excepciones, como son un par de australopitecos que se han encontrado muy completos y los esqueletos de una especie sudafricana llamada Homo naledi. En la Sierra de Atapuerca hay restos óseos de las manos en tres yacimientos. El más antiguo es una falange procedente del yacimiento de Sima del Elefante, con una antigüedad aproximada de 1,2 millones de años, que se atribuye provisionalmente a Homo erectus, y que también se puede ver en el MEH.

Homo antecessor. De igual forma, en el yacimiento de Gran Dolina se encontraron huesos de las manos de varios individuos, asignados a la especie Homo antecessor con una antigüedad de entre 800.000 y 900.000 años. En este sentido, precisaron que la Sima de los Huesos es el que ha proporcionado mayor número de restos óseos de las manos del mundo. Así, en esta exposición pueden verse dos brazos y dos manos prácticamente completos. De hecho, anunciaron que se incorporarán a la colección permanente del MEH cuando finalice este evento.

La cita cultural se completa con  los primeros instrumentos que utilizaron los humanos para cortar los alimentos, incluyéndose herramientas halladas en Gran Dolina, Galería y Sima del Elefante, además de diferentes adaptaciones al medio que el reino animal ha dado como respuesta a las condiciones particulares de cada ecosistema. Destaca entre estos esqueletos el del ornitorrinco, un animal que interesó mucho a Darwin al escribir El Origen de las Especies, exhibiéndose uno de los ejemplares.