Ni olor a rosas ni en buen estado

R.E. MAESTRO / Ibeas de Juarros
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Un grupo de chavales traslada el botellón a los cajeros de Ibeas, causando destrozos, y el alcalde emite un serio y contundente bando

Las cámaras ya pillaron en octubre a cuatro chavales de 14 años rompiendo botellas de cristal en varias calles. - Foto: Valdivielso

Sin oler a rosas ni en un buen estado se presentan los chavales en casa después de sus 'fiestas' en los cajeros de Ibeas de Juarros. Así de claro se lo deja el Ayuntamiento, a través de un serio y contundente bando, a los padres de aquellos que en las últimas semanas están ocasionando diversos daños en el municipio del Alfoz de Burgos y por ello les solicita que tomen las medidas oportunas para que este problema no se vuelva a repetir.

El botellón en Ibeas parece que se ha trasladado -debido al mal tiempo y a las lluvias- hasta los cajeros automáticos de las dos entidades bancarias, La Caixa e Ibercaja. Esta situación no se produce solo los fines de semana, también ocurre los días de diario, y ya se ha convertido en algo habitual que el interior aparezca lleno de suciedad, con desperdicios sobre las máquinas, con las paredes manchadas -de bebidas y escupitajos- y con numerosas colillas por el suelo. Los responsables de estas oficinas han transmitido su malestar y amenazan con cerrar dichas instalaciones en caso de seguir con este problema -y ante el perjuicio que está causando-, más allá de reservarse otras acciones que se consideren oportunas al contar con suficientes grabaciones.

Hacemos una llamada de atención a los padres. Al volver al domicilio sus hijos no olerán a rosas y les será difícil ocultar su estado tras ingerir alcohol y otras sustancias»

El alcalde de esta localidad del Alfoz de Burgos, José Ignacio Colina, ha avisado de estos hechos a la Guardia Civil y le han informado de que «tomarán cartas en el asunto». Así, se aumentará la vigilancia en las calles de Ibeas de Juarros y las patrullas se encargarán de controlar que estas actitudes de unos cuantos chavales del propio municipio no se sigan produciendo. Del mismo modo, ha pedido a los padres a través del bando que estén atentos cuando sus hijos vuelvan al domicilio, «pues obviamente no olerán a rosas y les será difícil ocultar su estado tras ingerir alcohol y otras sustancias».

Los responsables de estos hechos son jóvenes de entre 14 y 18 del propio pueblo, asegura el regidor, que muestra su hartazgo ante esta situación e insiste a los padres para que traten el asunto con sus hijos. Cree que se trata del mismo grupo que meses atrás ya causaron algunos actos vandálicos. Ahora se han juntado algunos más mayores con otros de menor edad y se ha agravado el problema. A mediados de 2024 apareció el molino de la localidad con grafitis y con la puerta rota -lo que se denunció en la Guardia Civil-, y más adelante robaron las pancartas de protesta por la A-12. El vandalismo regresó en octubre y las cámaras pillaron a cuatro menores que rompieron botellas de cristar por varias calles durante los fines de semana. Tras un tiempo con menos incidentes reseñables, ahora otra vez vuelven a la carga generando daños en los cajeros de las entidades bancarias.

El Ayuntamiento ha decidido organizar, a través del CEAS, diversos cursos de «prevención y corrección de este tipo de adicciones», destinados tanto a los chavales como a los padres. Así, a través de ese bando también les han solicitado que asistan a estas jornadas que se ofrecerán debido a que en casos como estos resulta esencial la intervención de los adultos para «revertir» la situación.