A menos de dos meses para la celebración del Festival Nacional de Charangas en Poza de la Sal, los miembros de la organización trabajan en la elaboración de un programa centrado en la música. Por primera vez en las X ediciones cuentan con el apoyo de los voluntarios de Protección Civil local para que el 4 de mayo la seguridad de los miles de asistentes que se aglomerarán en las calles de la villa esté garantizada. Al igual que en anteriores ediciones, la subdelegación del Gobierno también colaborará.

El periodo de inscripción de las agrupaciones que pretendan representar a su región todavía permanece abierto y un jurado presidido por la música Marian García Padrones seleccionará a la mejor. En el año 2023 se coronó La Patalea, de la Comunidad Valenciana, otras dos recibieron el segundo y tercer premio económico, y una quinta y sexta un trofeo. El público eligió a sus favoritos y la mejor percusión y el mejor solista también fueron reconocidos.

Según los datos que aportó Cruz Roja, en 2023 disfrutaron de la fiesta entre 7.000 y 8.000 personas, un incremento notable palpable año tras año, más aún después del parón obligatorio como consecuencia de la pandemia. Los pozanos, que se sienten orgullosos del éxito de su evento, no ven con tan buenos ojos los comportamientos injustificados de un número importante de público que se dedica a «orinar las calles o dejar desperdicios por cualquier lado», denuncia una vecina. A pesar de que en la última edición se incrementó el número de baños públicos, desde la organización del Festival han solicitado «más personal de limpieza que trabaje junto a los operarios municipales», con el fin de que el domingo a primera hora de la mañana no queden restos de basura en ninguna zona. 

El evento arrancará el sábado a las «12 horas  y se alargará hasta las 22» con la entrega de premios como punto y final a una jornada en la que solo se acepta la diversión. El programa de actividades todavía no ha quedado cerrado y por el momento no hay constancia de que el Ayuntamiento o alguna asociación organice alguna alternativa. Antes de que comience el espectáculo y de que los músicos de las charangas demuestren sus dotes con los instrumentos y los bailes, estos deberán recoger sus acreditaciones. 

A continuación, la Banda Municipal de Música se encargará de la inauguración. A partir del mediodía, empezará el turno de musicalidad en el escenario de la plaza Nueva, en el que cada agrupación interpretará un tema de libre elección durante unos minutos, y ya por la tarde tendrá lugar la ronda por las calles.

La oferta gastronómica estará asegurada con restaurantes móviles, uno de ellos especializado en la elaboración de los típicos talos vascos, y la sensibilización con el medio ambiente se tendrá muy en cuenta. La vajilla y los vasos de los bares será reutilizable y estos tendrán un coste de un euro.

Las posibilidades de pernoctar en un alojamiento de la zona se limitan según se acerca el día, y el albergue pozano de Pedrajas ya no cuenta con plazas libres. Sin embargo, los viajeros que acudan en autocaravana o furgoneta dispondrán de un amplio espacio junto a las piscinas, donde también se podrá acampar, y de fincas habilitadas para estacionar.