El Burgos CF tiene muy avanzadas las negociaciones para vender parte de su accionariado de forma inmediata y posteriormente tiene acordados unos hitos temporales para que los nuevos inversores se hagan con la totalidad del club. Alejandra de la Vega, una empresaria mexicana propietaria del FC Juárez que milita en la Primera División de México, negocia desde hace tiempo con el grupo Yucon para desembarcar en el Burgos CF y en el fútbol europeo.
Su marido, el también empresario estadounidense Paul L. Foster, está relacionado con el deporte y cuenta con un equipo de fútbol en la segunda categoría de Estados Unidos, El Paso Locomotive, así como los Chihuahuas de El Paso, de béisbol. Es también el propietario de Franklin Mountain Investments. Su actividad está centrada en la comercialización y el refinamiento del petróleo, aunque además se dedica a la construcción, el deporte o la energía. Según la revista Forbes está entre las 2.000 personas más ricas del mundo.
Están dispuestos a apostar fuerte por el Burgos CF e invertir para que la entidad blanquinegra ascienda un escalón deportivo y llegue a la Primera División.
Desde hace un tiempo la familia Foster de la Vega ha estado buscando el club idóneo para dar el salto a Europa. Se les relacionó con el Espanyol en marzo del año pasado, pero al final las negociaciones no llegaron a buen puerto.
Sin embargo, parece que con el Burgos CF todo está encauzado y encaminado, aunque falta dar el último paso. En las próximas semanas podría llegar el acuerdo para que adquirieran el 49% de las acciones, por lo que Yucon seguiría teniendo mayoría.
Posteriormente, hay pactados unos plazos para que en los meses siguientes el club acabe en manos de los propietarios del FC Juárez. En la operación también estaría Andrés Fassi, un empresario argentino vinculado con el fútbol y con México, que fue socio del Grupo Pachuca y que se ha convertido en uno de los intermediarios.
El objetivo de la familia Foster de la Vega es el de hacerse un hueco en el fútbol europeo y seguir los pasos de otros empresarios mexicanos como el Grupo Pachuca o el Grupo Orlegi, propietarios del Oviedo y el Sporting, respectivamente.
La operación está en su fase final y no sería de extrañar que se realizara en las próximas semanas. No obstante, también hubo otras posibilidades como la del grupo japonés que llegaba de la mano de David Villa, que estuvo muy cerca de hacerse con el Burgos, pero que finalmente se echó a un lado.