Van Overveld ultima su nave en Ircio pero no consigue chóferes

ARSENIO BESGA / Miranda
-

La firma logística ya tiene 15 empleados en Miranda y desea llegar a 30 cuando acabe las obras en julio, aunque reconoce que «es complicado encontrar conductores» y cree que este problema «va a peor»

La nave de Transportes Van Overveld ocupará unos 4.500 metros cuadrados junto a la de Remaelectric. - Foto: A.B.

El desarrollo del sector logístico que ha vivido Miranda durante los últimos años le ha permitido atraer a multitud de firmas dedicadas al movimiento de mercancías por carretera o incluso a través del ferrocarril, como TCM. Dentro de ese amplio listado se encuentra la compañía Transportes Van Overveld, que ultima su proyecto en el polígono de Ircio y desea llegar a los 30 empleados, entre personal logístico, administrativo y de mantenimiento. Eso sí, no va a tener nada fácil lograr ese objetivo. El responsable de la empresa en España, Thijs Beckers, espera que todos los trabajadores previstos «se puedan incorporar según estén listas las obras, porque cuando hay tanto trabajo hay que contar con las personas suficientes», aunque aclara que «no es algo seguro» básicamente porque «es complicado encontrar conductores» y además cree que este problema «no va a mejorar, sino que va a peor».

El responsable de Van Overveld  en la Península es consciente de que cada día hay menos personas con vocación por subirse a un camión, sin embargo, por ahora la empresa ha podido operar en Miranda con bastante suficiencia. Pese a que su nave del polígono de Ircio aún está en proceso de construcción, la firma de Países Bajos ya ha contratado en la ciudad a  15 transportistas. Concretamente, Beckers comenta que llevan a cabo su actividad desde unas instalaciones en Rivabellosa, que les están permitiendo descargar en torno a 20 remolques cada semana. 

Desde esta compañía logística tienen claro que «hay margen de crecimiento». El propio responsable en España así lo explica, aunque supedita ese incremento de su plantilla y de sus movimientos en el área de Miranda al fin de las obras en Ircio. Sobre estos trabajos, Beckers apunta que «en principio está todo bien, pronto empezarán con la instalación del techo» y añade que «la nave ya está hecha como tal».

Las labores llevan tal ritmo que en la empresa esperan que «para finales de julio esté todo listo», de tal manera que puedan «entrar ahí» en ese momento y gestionar cada uno de sus movimientos ya desde el término municipal de la ciudad del Ebro.

La fecha marcada por la compañía para ejecutar este proyecto ha ido cambiando desde que anunció la compra del terreno en este polígono. En un primer momento, desde Van Overveld estimaban que la nave estaría completada y a pleno rendimiento durante 2022. No obstante, cuando ya se acercaba el otoño de aquel año, el propio Beckers explicaba a Diario de Burgos que el alza de los precios había obligado a replantear en calendario, por lo que el inicio de las labores sobre el terreno se tuvo que retrasar a 2023. Ese plazo sí se cumplió. En agosto del ejercicio pasado las máquinas entraron a la parcela de Ircio e inauguraron las obras, que previsiblemente iban a concluir para septiembre de 2024, aunque ahora la firma ha recortado ese margen un par de meses.

Una vez que la nave situada junto a Remaelectric esté ejecutada, la entidad con matriz en Países Bajos dispondrá de unas instalaciones de 4.500 metros cuadrados construidos y otros 5.800 metros cuadrados de zonas exteriores que, entre otras cosas, albergarán un aparcamiento para camiones con casi una decena de plazas. Con ello, Ircio ganará un nuevo inquilino y aumentará su actividad, mientras grandes compañías como Aldi ultiman sus proyectos y otras como Panattoni empiezan a encauzarlo.