Los amasijos de escombro en que se ha convertido el antiguo Centro de Transmisiones CT-9 de la Unidad de Ingenieros del Ejército de Tierra situado en Picón Blanco siguen sin ser retirados a pocos días del paso de la vigésima etapa de la Vuelta a España y la que muchos consideran que decidirá la ronda ciclista este año. El permiso que la Junta de Castilla y León debía de conceder a la constructora para instalar una planta de machaqueo del escombro en el monte llegó ayer, pero ya es imposible llevar a cabo los trabajos antes del evento deportivo, y tratarán de iniciarse lo antes posible para sortear el duro invierno a 1.529 metros de altitud.
Las obras han estado paradas julio y agosto, como avanzó DB, aunque el permiso había sido solicitado hacía 16 meses, según los responsables de la empresa HRD Amo 2109, a quienes fue la propia Junta de Castilla y León la que adjudicó los trabajos de derribo y recuperación ambiental del entorno a cambio de 313.000 euros. Era un proyecto por el que el equipo de gobierno popular trabajó durante la pasada legislatura, pero no ha podido llegar a tiempo para una fecha tan importante.
El ahora alcalde espinosiego, Paul Sánchez, «decepcionado con la burocracia de la Junta de Castilla y León», confía en que el helicóptero de Televisión Española esquive las toneladas de residuos amontonadas. Asimismo, la empresa le ha trasladado que vallará la zona y varios operarios trabajarán estos días en la retirada de hierro.
Mientras, el regidor elogia las tareas desarrolladas por la Administración regional en el puerto para garantizar la seguridad y, en especial, «como han quedado las biondas, las alambradas y los cierres». Asimismo y aunque el Consistorio ya realizó tareas de limpieza en la zona de la carretera municipal, acudirá de nuevo a retirar los vertidos que han quedado depositados tras las últimas tormentas.