La Fundación Caja de Burgos ha propiciado durante el 2021 la puesta en marcha de doce nuevos proyectos empresariales a través de su programa Emprendedores. Así lo han anunciado este viernes el director general de la Fundación, Rafael Barbero, que ha comparecido junto al responsable del área de Dinamismo Empresarial, Javier Cuasante y del director del ITCL, José María Vela. Se trata de una iniciativa que pretende apoyar, en el ámbito de la capital y su provincia, tanto el nacimiento y/o consolidación en firmas ya existentes. El programa cuenta con la dirección técnica del Instituto Tecnológico de Castilla y León (ITCL) y la tutorización de expertos que desarrollan su actividad dentro del tejido empresarial burgalés.

De la docena de nuevos proyectos que han salido de la Fundación Caja de Burgos, ocho están liderados o coliderados por mujeres, mientras que dos radican en un municipio de la provincia. Al cierre del ejercicio (31 de diciembre de 2021) eran 65 los proyectos activos: 29 se encontraban en fase de lanzamiento, 16 en desarrollo y otros 20 en preevaluación.

En el primer cuatrimestre del 2022 han llegado hasta las oficinas de la entidad 34 candidaturas, de las cuales 13 han superado la entrevista y se han incorporado al programa Emprendedores. Además, tres proyectos que ya estaban adheridos a esta dinámica han dado un paso más y presentado su plan de empresa. El crédito concedido por la Fundación Caja de Burgos asciende en los cuatro primeros meses del curso a los 15.000 euros, aunque ya se ha aprobado otro crédito por ese mismo valor y se está estudiando un tercero. Del mismo modo, se ha dado luz verde a una primera ayuda a prototipos por valor de 2.000 euros. En relación a los proyectos activos en estos momentos, 19 se encuentran en fase de incubación y 20 en la etapa de lanzamiento o aceleración.

RETOS.

El objetivo para este ejercicio es alcanzar los 15 proyectos presentados y tener activos otros 24 en fase de desarrollo y 15 en fase de aceleración. El presupuesto destinado al Programa Emprendedores alcanza los 102.000 euros, al que se suma la aportación al emprendimiento a través de otras iniciativas, como POLO positivo, o la puesta a disposición del Centro de Dinamismo Empresarial.

Con el objeto de dar la máxima visibilidad a los proyectos apoyados, y de que otros emprendedores puedan conocer y apoyarse en los programas, la fundación pondrá en marcha en los próximos días una campaña de comunicación en la que doce emprendedoras y emprendedores de los ámbitos tecnológico, artístico-creativo, de producción y servicios, y ubicados en entornos rurales, compartirán sus experiencias a través de cuatro interesantes conversaciones que estarán disponibles en el medio online para su visionado (www.cajadeburgos.com/canalempresa).

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