Primero suena la voz de la zamorana Ana Maes rapeando en solitario (Acicalados por dentro y no por fuera, anestesiados en busca de nuestra quimera) y enseguida el ritmo se acelera, se escuchan los acordes de la guitarra y entra el cuarteto de Memocracia con toda la artillería. Llega entonces el estribillo, una tonadilla que durante el último siglo han interpretado varias generaciones y que se vuelve ahora marchosa, rockera y desenfadada camino de convertirse en himno también de los nacidos en el siglo XXI. 

El guri-guri de Memocracia y Ana Maes cobra nueva vida para hablar de las dificultades de los artistas emergentes (Somos la voz de una generación huérfana de reconocimiento), la desesperanza y la falsas expectativas (Buscando las respuestas sin saber dónde mirar, desorientados en un mundo irracional), pero también de la alegría, el valor de la amistad o las ganas de seguir avanzando (Aprender a vivir en un trueque constante entre lo nuevo y lo anterior). 

Con este tema y el vídeo correspondiente que acaban de publicar en las plataformas digitales, «devolvemos a la gente una canción pensada para cantarla, aportando un poco de alegría y desinhibición», sugiere Gabriel Román, que junto a Germán Alonso, Álex García y Diego Moral conforman el grupo de punk-rock Memocracia, el mismo que ha sido telonero de La M.O.D.A., Ginebras o Desakato.

Ana Maes y Memocracia interpretaron el tema en el Festival Tribu y, tras grabar el single, volverán a juntarse para cantarlo en La Ciudadela, el 21 de marzo. - Foto: Sara Irazábal

La idea de llevar a su terreno El guri-guri surge del Festival Tribu, cuando pusieron en marcha la iniciativa Volver, que implicó a cerca de cuarenta artistas para que versionaran los temas del Cancionero de Antonio José que el grupo Orégano grabó en un disco hace cuarenta años. La canción, ya como himno, la interpretaron en los jardines de La Parrala y ahora la han grabado como single.

El trabajo masterizado por Jacobo Naya incluye un vídeo grabado en Santa María del Campo por Sergio Ibáñez, con portada artística de Ismael Ali de Unzaga. «El vídeo lo hemos hecho en un entorno rural que es donde más sonaban este tipo de canciones y con la presencia de personas de distintas generaciones porque no deja de ser el encuentro entre todas ellas», añade Gabriel, que trabaja como agricultor en ese pueblo y en las imágenes aparecen su padre y algunos de sus amigos.

Con ellos, el frenético ritmo que identifica a la banda y la voz de Ana Maes echan la vista atrás para fijarse en la música tradicional, rescatando también «mensajes que, por muy antiguos que parezcan, esconden enseñanzas muy actuales y aplicables hoy en día».

El lanzamiento del single sirve para que tanto Ana Maes como Memocracia cierren una etapa justo antes de afrontar nuevos proyectos. Pero antes de que cada cual se meta en un estudio con lo suyo, el 21 de marzo volverán a juntarse para cantar El guri-guri en La Ciudadela.

Si la escuchan, ya les digo desde aquí que la letra que ya conocen -y con la que El Nido concluye también sus conciertos- la entonarán a partir de ahora con más garbo y sobre todo con un aire de fiesta que se queda grabado e incita a bailar. Si no recuerdan la letra, apunten: Con el guri, guri, guri / que lleva la boticaria, / parece que va diciendo: / -Del junquillo sale el agua.-/ Del junquillo sale el agua, / de Medina sale el sol, / de Villarcayo los rayos / Alégrate el corazón. Ahora escuchen la canción en YouTube y pónganse a bailar.