No hay que buscarla en ninguna farmacia, ni tomarla cada 8 horas y mucho menos pagar por consumirla, pero su fórmula es clave para mejorar la salud física, mental y emocional de las personas. La receta se llama naturaleza, y el contacto con ella ayuda también a reducir el estrés, fomentar la actividad física, estimular el desarrollo infantil o combatir el cambio climático, entre otros beneficios respaldados por la ciencia. Ante este abanico de evidencias, los municipios burgaleses de Huerta de Arriba, Vilviestre del Pinar y Canicosa de la Sierra han decidido instar a las autoridades sanitarias estatales y regionales «a integrar programas de prescripción de naturaleza en las políticas de salud pública».
Las tres localidades son las únicas de la provincia integradas en la Asociación Española de Pueblos de Montaña, y según la misma han decidido adherirse a su manifiesto, donde también piden a las empresas que desarrollen proyectos que promuevan actividades al aire libre y que respeten el medio ambiente. Igualmente solicitan a las personalidades públicas a que aporten su influencia para liderar con su ejemplo y sean embajadores de la iniciativa e invitan a la sociedad en su conjunto a valorar y proteger los espacios naturales como un recurso esencial para el bienestar colectivo.
En cuanto a esta fórmula de recetar naturaleza ya existe. En Japón, desde el año 2004, estudian la medicina forestal y desarrollan la denominada PrescripciónSocial Verde, que sustituye fármacos por estancias, excursiones o actividades en la naturaleza, según recoge el manifiesto. «Queremos que la naturaleza sea vista no solo como un recurso de ocio, sino como un elemento esencial para la salud y el bienestar de las personas. Las evidencias científicas son claras: el contacto regular con espacios naturales reduce el estrés y la ansiedad, mejora la salud mental y fomenta la actividad física», explican desde el colectivo, que asegura que según estudios de Psicología se ha demostrado que ese contacto con la naturaleza impacta positivamente en la salud laboral y en la definición moderna de éxito empresarial.
En lo relacionado con la salud, desde la asociación asumen el compromiso de colaborar con el sistema de salud pública y privada para incluir la prescripción de naturaleza como parte de las recomendaciones médicas, especialmente en el tratamiento de enfermedades crónicas, trastornos de salud mental y rehabilitación física. También aceptan otras responsabilidades, como reconocer y difundir los beneficios de la naturaleza, facilitar el acceso a espacios naturales, promover la educación ambiental, apoyar la investigación científica e incorporar la naturaleza en la cultura y el deporte.
Estancias para respirar. Ramiro Ibáñez, alcalde de Canicosa, mantiene que la medida no es nueva y recuerda como muchos habitantes del País Vasco pasaban temporadas en la comarca de Pinares por recomendación de su médico para respirar un aire más puro. «Alquilaban muchas casas de pueblos de la zona para pasar temporadas. No solo ofrecemos un buen oxígeno, sino que también somos un buen lugar donde desestresarse», comenta el regidor en relación a este recurso natural vinculado a la salud. Por otro lado, Javier Chapero, alcalde de Vilviestre, afirma que «cualquier fórmula para atraer visitantes es buena» y reconoce la riqueza de su entorno para dar cobertura a esa receta de naturaleza.
Hontoria del Pinar será el cuarto burgalés. Hontoria del Pinar aprobó en su último pleno su adhesión a la Asociación Española de Pueblos de Montaña, por lo que se convertirá en la cuarta localidad burgalesa en formar parte de ella. Con esta incorporación, como expresa su alcalde, Miguel Álvarez de Eulate, confían en aumentar su promoción turística.
La agrupación nació en el año 2013 como una idea de varios alcaldes de zonas de montaña y senadores, que decidieron unirse para reivindicar las necesidades de los municipios de montaña de España. Busca potenciar estos pueblos, defender sus intereses y convertirlos en un referente social y económico.